Advertencia: está historia contiene temas que para muchos es son muy fuertes, si eres sensible con algunos casos es mejor que no lo leas, y si igual quieres leer adelante :)
Nuestro protagonista Dobi tuvo un sueño desde pequeño que era imposible de...
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Okey... Soy Dobi, tengo 27 años y mi infancia fue uno de mis momentos de oro, pero al entrar a la secundaria todo cambio de ser felicidad a odio, me hacían bullying por tener un sueño peculiar y me decían de cosas como:
Lg- ¿Encerio piensas que podrás cumplir ese sueño?Es tonto
A- es un sueño muy fantacioso
En la mente de Dobi:
D- Déjenme en paz.
15 años después
Todos mis días son iguales, una rutina normal haciendome un café, no tenía empleo en ese momento ya que había terminado los exámenes y los entrenamientos para ser policía y apenas me mudé a una casa donde vivo solo, y así estuve unos meses sobreviviendo con lo que tenia por el momento.
Un día tocan mi puerta y era el cartero que venía a entregar el correo:
Mr.h- Buenos días Dobi.
D- Buenos días Señor Hámster, ¿que tiene hoy para mí?.
Mr.h- una carta de la academia de la ciudad.
Senti mariposas en mi estómago y miedo de que no fuera aceptado. Cuando me entrego la carta solo queria verla pero el miedo no me dejaba, solo sentía que mis manos no me permitían hacer mucho. Le agradecí al señor Hámster y cerré la puerta, habri el sobre y vi un listón rojo y al leer ví que me aceptaron como policía de la ciudad, de la felicidad corrí por toda la casa y casi me rompo una pata, pero siento que eso valdría la pena, pero al ver que tendría que irme de mi ciudad para ir a La Ciudad de Huella-Marca:
D- ¡Eso es al otro lado del mundo carajo!
Tuve que ir a comprar un boleto y empacar para mi vuelo. El viaje duro aproximadamente un día y 4 horas, al llegar a una ciudadanía tuve que tomar un tren para llegar a la ciudad de Huella-Marca por qué está se hubica en una isla grande. Al llegar tuve que buscar un departamento para quedarme mientras consigo dinero, explore la ciudad para adaptarme. Al llegar a mi departamento vi las noticias de la ciudad y me doy cuenta que aquí hay mucha corrupción y tráfico de drogas, al parecer hay mafias con todo tipo de problemas.
A la siguiente semana fui a la estación de policía de la ciudad pero me daba miedo de entrar y además me empezaba a sentir inseguro de mi mismo. Entre y vi como todos estaban trabajando, atendiendo llamadas, pasando papeles de un lado a otro y hasta algunos discutiendo, me puse nervioso al ver tanta gente en todas partes. Entre y se me quedaron viendo solo los veía y sonreía hasta que alguien me jalo del brazo directo a una oficina, tuve un momento para saber en dónde estaba y lo que pasaba, volteo y veo a un perro de raza Labrador, le pregunte quién es y él me responde:
L- La pregunta es ¿quien eres tú? Me quedé con cara de sin saber lo qué dice y le respondo:
