una llama helada Icy X Bloom

Capitulo 9

Unos días después, Icy reunió a todas las chicas en su dormitorio.

"Señoras, tengo algo en mi posesión que prácticamente garantizará nuestra victoria contra Valtor," dijo la bruja de hielo y sacó una gran joya cuadrada azul. "Les presento el zafiro shojou-ai."

"Es muy bonito", dijo Stella. "¿Pero cómo nos ayudará eso a detener a Valtor?"

"Me alegra que le preguntes rubia. Esta joya es en realidad uno de los varios doo-dads místicos que Valtor ha adquirido durante su conquista gradual del universo. Me embolsé éste antes de cambiar de bando"

"¿Por qué hiciste eso?" Tecna preguntó.

"Por cómo funciona", dijo Icy. "La joya lleva a dos chicas que son románticas una con otra, y copia parcialmente sus poderes y los intercambia. Ya que sólo funciona así, decidí que Valtor no tendría ningún uso para ello y lo tomé yo misma".

"Interesante. Ahora, cuando dices que la joya copia y pega poderes...", Bloom dijo, en busca de más explicaciones.

"Te daré un ejemplo: si las dos lo usamos, yo tendría algo de tu poder de fuego añadido encima de mis propios poderes y tú tendrías algo de mi poder de hielo además de lo que ya puedes hacer"

"Ya veo," dijo Tecna acariciando su barbilla. "Eso nos daría un gran impulso. Y por nosotros, me refiero a los de nuestro grupo que están involucrados con otra chica".

"Exactamente," dijo Icy con una sonrisa.

"¿Cómo hacemos para que funcione?" Musa preguntó. "¿Nos tomamos de la mano y cantamos, o quemamos incienso?"

"Nada tan afortunado," dijo Icy con un tinte de arrepentimiento.

"El shojou-ai zafiro se activa cuando las dos chicas enamoradas se paran frente a él y se hacen confesiones de amor. Luego hay un destello brillante de luz y el cristal hace sus cosas. Sugiero que nos tomemos unas horas pensar en qué decir y que nos reunamos aquí".

Las otras chicas estuvieron de acuerdo y se fueron para conseguir algo de privacidad y expresar sus sentimientos.

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Aproximadamente cuatro horas después, reconvinieron. Flora y Myrta se ofrecieron como voluntarios para ir primero y se pararon frente al zafiro shojou-ai mientras se enfrentaban.

"Flora," comenzó Myrta, "cuando me salvaste de vivir el resto de mi vida como una calabaza, me sentí abrumado por tu generosidad. Más tarde, como supe conocerte, estaba tan abrumada por tu belleza y modestia. Tenía tanto miedo de lo que harías si te enterabas de mis sentimientos, así que los mantuve en secreto. Pero entonces Helia murió, y necesitabas que estuviera ahí para ti Y cuando me dijiste que me darías una de oportunidad, fue el momento más feliz de mi vida".

Flora tomó un segundo para absorber lo que Myrta acababa de decir y se sintió profundamente conmovida. "Cuando me besaste por primera vez," comenzó Flora, "Pensé que la razón por la que no me asqueaba al besar a otra chica era porque siempre me había atraído por las chicas y nunca me había dado cuenta. Pero cuando me acerqué a ti, me di cuenta de que no era el caso. Me sentí atraída por ti por lo que eres como persona, no como una chica."

Después de que ambos hubieran dicho su declaración sincera, la joya brilló y luego emitió un destello brillante de luz. Mryta extendió su brazo y conjuró un poco de polen dorado que cayó al suelo hizo aparecer algunas vides vegetales.

"Parece que el intercambio funcionó", dijo Flora. "Me pregunto qué obtuve de ti."

"Desafortunadamente Flora, soy lo que se conoce como una usuaria genérica de magia", dijo Mryta. "No tengo ningún tipo de atributo especial como tú y los demás. La joya solo aumentaba de manera probable tu nivel total de magia sin darte ningún tipo de nueva habilidad."

"Está bien. Después de todo, no empecé a salir contigo solo para aumentar mis propios poderes", dijo Flora con una sonrisa. Los dos se apartaron para que Musa y Layla pudieran tomar su turno.

"Cuando me contaste tu plan por primera vez y que también te gustaba," dijo Layla, "estaba tan feliz de que me fuera a dejar de tener que casarme con un extraño. Pero luego nos acercamos, y me sentí menos aliviada de no estar casándome con un extraño y más extasiada de estar casándome contigo".

"Cuando se me ocurrió mi plan para salvarte de tu matrimonio arreglado," Musa comenzó, "Lo hice tanto para salvarte como para estar contigo. Y cuando te dije que tenía dudas acerca de que nos casáramos y tú estabas dispuesta a dejarme ir, supe que nunca encontraría a nadie que estuviera dispuesta a hacer ese tipo de sacrificio por mí".

Una vez más la joya brillaba brillantemente. Layla extendió uno de sus brazos y creó una onda sonora mientras Musa conjuraba algún material de morfix rosa. Ambos se maravillaron de sus nuevas habilidades y luego se apartaron para que Bloom e Icy pudieran irse.

"Está bien," dijo Icy y respiró profundamente. "Todo y todos los que no sean Bloom será mejor que salgan de aquí ahora mismo si saben lo que es bueno para ellos", gritó la bruja de pelo blanco y los demás cumplieron. "Ahora que eso está fuera del camino, es hora de hablar desde el corazón. Y como no tengo, estoy segura de que puedes entender lo difícil que es esto para mí".

Bloom soltó una pequeña risita. "Entonces yo iré primero," ofreció la pelirroja.

"Cuando me capturaste y despertaste los sentimientos de alegría dentro, estaba confundida, Pero lo superé y me di cuenta de lo mucho que me gusta lo que puedes hacerme. Me enamoré de ti"

"Cuando te capturé y violé por primera vez," dijo Icy, "eso fue pura lujuria: ningún sentimiento de apego o amor en absoluto. Pero entonces te entregaste voluntariamente a mí, y por primera vez empecé a sentir cosas que no fueran la lujuria por otra chica. Te amo tanto como soy capaz de amar a alguien".

Por tercera vez en menos de una hora, el zafiro shojou-ai destellaba. Bloom levantó un brazo y creó un cristal de hielo.

Mientras admiraba la belleza de su obra, Icy conjuró una llama en su mano. Podría acostumbrarme a esto, Icy pensó mientras una sonrisa agraciaba su cara.

"Esta fue una gran idea, Icy", dijo Bloom.

"Este nuevo intercambio de habilidades será una gran ayuda para el enfrentamiento Valtor."

"Espero que así sea," dijo la bruja del hielo y ahora el fuego).