Love at first kiss

327 28 10
                                    

Marco esperaba ansioso la llegada de su extraño compañero. Había dejado que unos chicos de la facultad de artes lo enredara en participar en un proyecto. Y allí estaba, delante de unas cámaras fijas en él, esperando que una chica o un chico se presentara delante suyo. Oyó voces de varios chicos y quejas por parte de uno, el cual adivinó que sería su pareja. Sonrió por sus adentros al ver como un chico rubio con un gorro rojo se acercaba a él a regañadientes, mirando al suelo sin atreviese a levantar la mirada.
Reiner y Eren, así se llamaban los impulsores del proyecto, les dieron la instrucciones de mirarse y así lo hizo el moreno. Miró fijamente a su pareja, sintiendo como un escalofrío recorrió todo su cuerpo. ¿Lo conocía? No recordaba haberlo visto por la facultad ni por otro sitio.. ¿Entonces por qué sentía que lo conocía tan bien?
Sin poder evitarlo, dio un paso adelante, levantando su brazo para alcanzar la mano del rubio, sintiendo otra vez, y con más fuerza, ese escalofrío. Y el menor también lo sintió. Fue entonces cuando se miraron cara a cara por primera vez. Cuando sus ojos se vieron reflejados en el del otro. Marco quedó embelesado y su único pensamiento era no soltar esa mano jamás, abrazar al pelirrubio y besar esos labios una y otra vez. Dio un paso al frente y llevó su otra mano al pelo del más bajito, quitando así su gorro. Posó su mano en su mejilla y dejándose llevar se agachó inclinando su cara hacia un lado, llegando hasta los labios del chico, besándolo como nunca había besado a nadie. Tiernamente, lentamente, sin prisa. Quería disfrutar de esa sensación intoxicante. El menor respondió y eso sorprendió gratamente al mayor. Se besaron despacio, sintiéndose el uno al otro. Todo desapareció. Los focos, las cámaras, la gente, todo. Ahora solo estaban ellos dos. Hasta que una risa les sorprendió. Marco abrió los ojos y se separó del rubio sin soltar su mano y notó como sus propias mejillas se tornaban de color rubí, al igual que las de su compañero. Sin poder evitarlo soltó una gran carcajada llena de vergüenza y notó como el menor se soltó de su mano, algo que le llenó de una inmensa tristeza. El experimento se había terminado y con ello esa conexión ¿o no?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 30, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

It's so niceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora