Capítulo 38

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Por la noche, cuando Huo Chi regresó del trabajo, vio las luces encendidas en la villa de al lado.

En el pasado, esta villa estaba a oscuras y era solo una casa vacía, pero ahora que el nuevo propietario se ha mudado, a través de las ventanas aún se podían ver las cálidas luces del interior.

Huo Chi se detuvo al costado del camino y miró la acogedora casa pequeña sin dar un paso adelante para tocar el timbre.

Un hombre maduro debe aprender a ser paciente y no ser demasiado impetuoso.

De todos modos, mientras espere un poco más, se reunirán mañana.

Mañana estará bien.

Huo Chi mantuvo la paciencia, incluso cuando trabajó al día siguiente, hasta que terminó su trabajo por la noche y pudo ir a ver a Ruan Feng.

La cena era en un restaurante del centro de la ciudad, había un ambiente agradable.

Cuando Huo Chi pasó, Ruan Feng ya estaba esperando en la sala privada, con un romántico ramo de rosas sobre la mesa.

Las rosas de un color rojo oscuro intenso estaban colocadas en el medio de la mesa, muy llamativas, Huo Chi miró el ramo de rosas y no se movió por un momento.

Ruan Feng estaba sentado enfrente, notó la mirada de Huo Chi, tomó el ramo de rosas y explicó: "Solo después de hacer la reserva me di cuenta de que era para parejas y me regalaron las rosas".

Cuando hacía la reserva habitualmente escogía la habitación para dos personas más cara, pero al llegar descubrió que era una habitación de pareja.

"Descubrí que, si agregas las palabras "para dos" a estos restaurantes y hoteles, el precio se puede duplicar varias veces", los ojos de Ruan Feng se curvaron.

Cuando Huo Chi levantó los ojos, vio esos ojos sonrientes y miró hacia otro lado, un poco incómodo.

Y como acababa de salir del trabajo, Huo Chi todavía vestía traje, vino directamente después del trabajo y ni siquiera tuvo tiempo de regresar y cambiarse de ropa.

Ruan Feng miró a Huo Chi frente a él, encontró que se veía más maduro cuando vestía traje y corbata y elogió: "Te ves tan guapo con traje".

Huo Chi no parecía saber cómo responder, por lo que respondió vagamente y sus orejas se pusieron rojas.

Pronto se sirvió la comida para ambos.

Ruan Feng estaba cortando el bistec y charlando: "Zhou Chen dijo que me había ayudado a leer algunos guiones de películas, supongo que más tarde volveré a grabar".

Recientemente, el equipo lo había estado ayudando a prepararse para su transición, dejando de lado los dramas juveniles y queriendo dedicarse dramas con temáticas más serias.

Ruan Feng siguió hablando de algunas cosas, pero él era el único que hablaba y Huo Chi frente a él solo asentía en respuesta de vez en cuando.

Huo Chi estaba muy callado, no murmuraba como antes, ni siquiera escogía las verduras que más le desagradaban cuando las comía.

Ruan Feng buscó un tema para hablar, cuando sin querer levantó la vista, notó que Huo Chi no decía ni una palabra, no sabía qué pasaba y preguntó: "¿Por qué no hablas?".

Luego, Huo Chi habló: "No sé qué decir".

"¿Demasiado ocupado en el trabajo?"

"Um."

El lugar quedó en silencio y Ruan Feng no pudo encontrar nada más de qué hablar.

Tal vez sea así después del trabajo, estaban ocupados con sus propios asuntos y los temas comunes eran cada vez menos.

Hay algo mal en la forma en que el villano me miraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora