Capítulo 1: El Comienzo.

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Mi nombre es Christopher Montenegro, actualmente vivo con mis padres y mi hermana mayor. Tengo 15 años y estoy en segundo año de secundaria, soy hijo de uno de los empresarios más importantes de Guatemala por lo cual estoy obligado a ser el "Hijo perfecto". Ser parte de una familia acomodada no es fácil pero bueno todo cambio para mi cuando conocí a Anthony el amor de mi vida. Es aquí cuando empieza nuestra historia.

Hoy es sábado y estoy ayudando a mi madre a decorar nuestra casa ya que hoy tendremos como invitados a los suegros de mi hermana mayor para celebrar su compromiso con Fabián un chico que conoció en un club de tenis, es un chico muy educado y amable, esta a un año de terminar la universidad. Es muy divertido estar con el ya que de vez en cuando tenemos salidas de chicos, mis padres están más que encantados con el hecho de que su su única hija se casara con el heredero de una empresa italiana.

— Cielo, ¿puedes decirle a tu hermana que me ayude con la decoración?— Preguntó mi madre mientras observaba la mesa frente a ella.

— Claro— Sin decir más entre a casa en busca de mi hermana, ya que la cena de compromiso se haría en el jardín mi madre y yo hemos estado en el jardín por tres horas.

Camine hasta estar frente a la habitación de Barbara y toque la puerta, unos segundos después escuche un "adelante" por parte de mi hermana así que entre con una pequeña sonrisa.

— B— La llamé con el apodo que le puse hace unos años— Mamá quiere que veas la decoración del jardín ahora.

— Esta bien, pero ¿estarás conmigo verdad?— Me preguntó con una sonrisa, normalmente hacemos todos juntos desde niños y ahora no seria la excepción no le puedo negar nada a esa chica.

—Claro, vamos— Sin más nos dirigimos al jardín para encontrarnos con nuestra madre.

—Sabes estoy algo nerviosa— Murmuró con un leve sonrojo— Sabes como son nuestros padres y tengo miedo de que digan algo fuera de lugar.

—Tranquila todo saldrá bien— Hable mientras la tomaba de un brazo, entendía su miedo ya que he tenido que presenciar como nuestros padres hablan sin pensar.

— Eso espero— Le dio un leve apretón a mi mejilla derecha— No se que haría sin ti bola de algodón— Ese apodo me lo puso desde el día que nací ya que según ella me parezco a una bola de algodón solo por el color blanco de mi piel.

Al llegar al jardín pudimos ver que nuestra madre ya había terminado, mi hermana y yo quedamos asombrados. Si bien nuestra madre era un poco intimidante y fría no podíamos negar que tenia un talento para decorar, no por nada era una de las diseñadoras de modas más famosas en América y Europa.

—Bien, creo que ya esta todo listo para esta noche— Dijo Barbara dando una vuelta en el jardín aún tomada de mi brazo— Esta hermoso mamá, gracias— Nuestra mamá solo sonrió y entro a la casa.

Ambos entramos detrás de ella y sentí que luego de terminar con la decoración el tiempo se fue muy rápido, cuando menos me di cuenta faltaban solo 10 minutos para que Fabián y su familia llegarán. Barbara estaba nerviosa se notaba porque a cada cinco minutos se alisaba la falda del bonito vestido negro que tenía, todos estábamos vestidos de manera elegante, por mi parte estaba vestido con un traje negro, llevaba una camisa blanca y una corbata negra mi cabello que siempre esta despeinado esta ahora bien arreglado gracias a mi madre y su estilista, ella siempre me dice que tengo un cabello muy bonito y que debo cuidarlo y así lo hago sólo que no me gusta tenerlo perfectamente peinado me siento raro. La verdad es que mi madre siempre intenta persuadirme para que vaya con su estilista ya que herede su forma y color de cabello. 

Su cabello y el mío es rubio y algo rizado cabe resaltar que tengo los ojos de mi padre. Soy como la combinación de ambos no soy muy alto mido 1.70 suelto un suspiro al pensar que soy como el típico niño rico, la única diferencia es que no soy caprichoso ni nada parecido. El timbre se escuchó y debido a eso me alejo del espejo donde me estaba viendo y me junto con mi familia en la sala, una de las chicas de limpieza abrió la puerta y pude ver en la entrada a Fabián, a una señora de cabello negro que estaba al lado a un señor de cabello castaño que pude reconocer como sus padres. A su lado se encontraba un chico más alto que Fabián, cabello castaño y piel blanca sin duda es lindo aunque no pude ver bien el color de su ojos. Los cuatro entran y se dirigen a nosotros el primero en saludar es Fabián, cuando lo hace veo de reojo a Barbara y esta algo pálida y no la culpo esta cena es importante y solo puedo rogar para que nuestros padres no lo arruinen.

— Buenas Noches señores Montenegro— Saluda mientras se acerca a mis padres, besa la mejilla de mi madre y le da un pequeño apretón de manos a mi padre.

— Buenas noches Fabián— Comenzó a hablar mi madre— Cariño ya te hemos dicho que nos llames por nuestro nombre, falta poco para que seas oficialmente un miembro de nuestra familia aunque claro ya te consideramos como tal— Finalizó mi madre mientras tomaba la mejilla de Fabián.

—Gracias por considerarme ya un miembro de su familia señ.. Perdón Regina y Leopoldo se los agradezco mucho— Respondió Fabián con una leve sonrisa.

Fabián volteó y se acercó a Barbara.

—Buenas noches princesa— Fabián beso la mano de mi hermana y ella se sonrojo, sin duda eran una pareja adorable. Luego me saludo a mi y yo solo agite mi mano en forma de saludo.

— ¡Oh!— Exclamo mientras de acercaba al chico castaño, lo había olvidado por estar pendiente del nerviosismo de mi hermana—El es mi hermano mayor Anthony— Fue inevitable para mi sorprenderme ante eso, aunque al parecer el único que no sabia sobre él era yo como siempre.

— Es un placer conocerlos— Les sonrió a mis padres y luego su mirada cayó en mi, sin darme cuenta me quedé un rato observando sus ojos verdes— Como mi hermanito dijo soy Anthony, Anthony Bianchi— Un hermoso nombre para un hermoso chico, cierto aún no lo he mencionado... Soy gay.

Tiene unos hermosos ojos verdes parecen como esmeraldas, mis pensamientos fueron interrumpidos cuando Anette mi nana nos aviso que la cena ya estaba lista y que teníamos que ir al jardín. Al estar todos en el lugar mencionado nos sentamos en la mesa, mis padres se sentaron juntos igual que los padres de Fabián. Barbara y Fabián también se sentaron juntos así que al final Anthony y yo terminamos por sentarnos juntos .

— Hola— Susurró Anthony para que nadie más que yo lo escuchara.

— Hola— Respondí con una pequeña sonrisa.

— No te sientes algo excluido al ver a las parejas juntas— Comentó en un intento por iniciar una conversación mientras traían la comida.

—Un poco— Claro que me sentía así pero no lo diré tan abiertamente— ¿Y tú? — Pregunté mientras miraba aún a las parejas.

—También, es algo raro estar rodeado de parejas y más si una la conforma mis padres— Me respondió con una sonrisa, a decir verdad no es muy lindo ver a tus padres comportarse como adolescentes enamorados, sentí un pequeño escalofrío por lo cual decidí mirar a otro lado.

Le iba a responder pero en ese momento llegó la cena y todos dejaron sus muestras de afecto a un lado para empezar a comer.

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Esta historia estuvo en edición durante una semana, hubieron varios cambios que espero sean bien recibidos. Gracias por el apoyo que le dan a esta historia, agradezco mucho que voten, comenten y me sigan, significa mucho para mi ya que eso me motiva. No importa si solo es una persona la que lee o veinte, al menos se que a una pequeña cantidad de personas le gusta lo escribo.

¡Gracias por leer!  💞🐼

Las noches en mi habitación. ( YAOI )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora