Esta historia me la pidió mi hermano el la leyó y me dijo quien la escribió y la leí y me parecio interesante hacer mi versión.
Le daré mi propio estilo pero no soy basura para robar el crédito de nadie.
Creo esta historia inspirada en el contenido...
Amanecía un nuevo día en Konoha y en la torre del Hokage se podía ver al actual equipo siete parados frente al Hokage que estaba serio mientras al lado del escritorio estaba una joven.
Tenía el cabello castaño lacio con un mechon atado con dos cascabeles, ojos dorados que parecían un poco apagados, tenia la misma complexión de Kiyomi, algo a lo que Anko y Mikoto veian con aprobación, usaba un pantaloncillo hasta las rodillas con sandalias Shinobi negras, una falda morada hasta los muslos, con un corte del lado derecho, una chaqueta lila con cinturones que sostenía dos cuchillas, con mangas moradas desgastadas y guantes negros donde estaba la placas de metal, ademas lo curioso fue la mascara que estaba atada a un lado de su cabeza.
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Mientras al lado de la joven estaban dos adultos que seguro serían sus padres, la madre se veía preocupada en su mirada pero tenia una sonrisa.
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Mientras el padre veía a Naruto de manera sería.
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--Bien equipo siete, les presento a su última compañera de equipo, Yakumo Kurama, ella será su nueva compañera. Dijo Hiruzen mientras Naruto sonreía y Kiyomi solo asintió, mientras Mikoto veia a la chica con su Sharingan y Anko con una mirada sadica.
--Hokage-sama usted sabe que mi hija no puede usar su chakra, entonces porque le da esperanzas de usarlo, sabiendo el peligro. Dijo el hombre mientras ponía una mano en el hombro de Yakumo que agachó la mirada, recordando ese detalle.
