capítulo uno

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— en dónde nicole vuelve al santiago bernabéu junto a su mejor amiga,
que lleva un cartel con una petición tentadora a la estrella del momento, jude bellingham.

VOTA Y COMENTA !( 50 votos desbloquean: CAPÍTULO 002 😵‍💫💘)— en dónde nicole vuelve al santiago bernabéu junto a su mejor amiga, que lleva un cartel con una petición tentadora a la estrella del momento, jude bellingham

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HACÍA EXACTAMENTE CUATRO años y 22 días desde que pisaba el Santiago Bernabéu. La última vez lo que hice fue durante la despedida de Brahim, que se marchó del club que lo vio crecer para buscar un sueño en Italia.

Y ahora estaba de vuelta.

Hacia cuestión de un par de meses que nos había llegado la noticia de que los blancos estaban interesados en traer a mi hermano de vuelta. Todos estábamos más que ilusionados ante la idea de tener a Brahim en casa de nuevo, aunque claro, la decisión era suya.

Tenía dudas, pero confié en que mi hermano no iba a decepcionarme, y no lo hizo.

Hoy, día 22 de septiembre, Brahim debutaba una vez más en el Bernabéu, y yo, como buena hermana, estaba aquí para apoyarle.

Bueno, a él, y, al parecer, también a alguien más.

—¿Judas has dicho que se llama?— pregunté a María con un lío tremendo.

Jude.— me corrigió, casi ofendida.

—Perdón, Jude.— rodé los ojos.

—Así es.— sonrió emocionada— ¿Crees que verá mi cartel?

El dichoso cartel.

María era mi mejor amiga desde hacía poco más de tres años. Cuando se enteró de que Brahim había vuelto a fichar por el Real Madrid, se pasó meses rogándome para que le consiguiera unas entradas para poder ver el primer partido de la liga de mi hermano, que se jugaba en el Santiago Bernabéu.

—Vamos, Nicooleee, por favor.— así se pasó un largo tiempo.

Me lo recordaba a cada minuto, y sus plegarias fueron varias. Me estuvo sobornando durante meses con compras, dulces, e incluso jurándome que me haría los deberes de Comunicación por el resto del trimestre (la cual cosa ambas sabíamos que no era cierta, pues María no abría un libro ni por recomendación, pareciera que les tuviera alergia).

Aún así, puede que yo aceptara alguna que otra sudadera de Nude Project, o algún que otro Kinder Bueno y Kit Kat; el escaso espacio que quedaba en mi armario y los dos kilos de más que llevaba encima me delataban.

Fuera como fuese, ahí estábamos las dos, cogidas de la mano y pasando el control de seguridad para adentrarnos a nuestro palacio, el lugar en el que se iba a disputar el partido más importante para nosotros en la liga: el primero, y encima un clásico.

KISS, JUDE BELLINGHAM.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora