Placer y Pecado-(Monarquia)

capitulo 01

Elena:

—ya me tengo que ir —le aviso a mi hermana antes de marcharme.

—claro cariño ve con cuidado y saluda a mamá de mi parte antes de irte —ella está en proceso de mudanza con su novio así que no tiene tiempo de acompañarme a casa.

—Está bien.

La casa de mi madre está a cinco minutos de la de mi hermana mayor, no sé ni para que se mudó. Luego de alistar las cosas que me faltan me despido de mis hermanos, afuera esta mi madre quien me ayuda a montar mi maleta en el auto de mi padre.

—Rebecca te mandó saludos, dice que vendrá en cuanto se desocupe —le doy un beso en la cien a mi madre.

—entiendo cariño, cuídate mucho —se despide mi madre.

Cuando me monto en el asiento del copiloto ella cruza a la ventana del piloto para despedirse de mi padre; se apoya en la ventana dejando que su abundante pelo rojizo con plateados destellos a causa de la edad caiga sobre sus hombros haciendo que mi padre trague en seco.

—cuídate —le susurra antes de darle un beso en la mejilla haciéndolo sonrojar.

—Amy... —dice en un hilo de voz haciendo que ella suelte su típica sonrisa pícara y que yo ponga los ojos en blanco.

—padre, madre —digo solemnemente rompiendo su burbuja— quieren terminar de despedirse, debo llegar a la ciudad antes de que Andrea entre a trabajar.

Mi padre carraspea y mi madre me giña un ojo antes de entrar a casa; mi madre es una mujer de rasgos llamativos que fueron heredados por tres de sus hijos, con una hermosa cabellera roja y ojos color miel como los de mi hermano se ve aún muy joven para tener cincuenta y dos años, todavía conserva su figura y sabe usar toda su sensualidad, mi pobre padre un día le dará un ataque al corazón pues ella disfruta ponerlo nervioso.

Dirijo la mirada a mi padre que mantiene la vista fija en el camino avergonzado porque lo haya visto así de nervioso con mi madre, aunque estoy acostumbrada a verlo así; mientras que mi hermano menor, mi hermana mayor y yo heredamos el pelo rojizo de mi madre, mi hermana más pequeña heredó el pelo rubio de mi padre; Antón Hoffman es un hombre muy tranquilo y reservado que al igual que mi madre no aparenta la edad que tiene, sus rasgos alemanes son muy notorios en su pelo rubio y sus ojos azules los cuales fueron heredados por sus tres hijas hembras.

Llegamos al edificio de Andrea donde me quedare unos días hasta que me acomode en mi apartamento, mañana temprano me entregaran las llaves y los muebles llegaran en la tarde; también debo buscar trabajo urgentemente porque, aunque mi padre pago el inicial, el alquiler me corresponde a mí.

—gracias, papá —me bajo del auto seguida de el quien me ayuda a sacar mi maleta.

—no hay problema hija, pero insisto en que deberías haberte mudado con tu amiga, ella no tenía ningún problema —comenta mi padre.

—lo se pa, pero ella vive con su novio y no quiero incomodarlos.

y no es que el novio me caiga muy bien— pienso para mis adentros.

—Elena —mi padre toma mi cara entre sus manos— el barrio donde te mudaste no es muy seguro que digamos, cariño la ciudad es peligrosa y más en estos tiempos.

Se a lo que se refiere, antes de venir tuvimos una seria discusión sobre mi seguridad pues aparte de la delincuencia normal de la ciudad, la mafia polaca volvió al país; mi padre trabaja en inteligencia para la policía y según el se ha registrado actividad delictiva por parte de los polacos así que mi padre casi da el grito al cielo cuando le informe que me cambiaria de universidad.