Sus ojos color miel eran lo único que podía ver en este momento, esos ojos con matices dorados que tanto había amado desde la primera vez que lo vi. Cole sonreía de lado, nunca dejaba de hacerlo desde aquella noche.
"¿Me veo tan mal?" le pregunté, tratando de acomodarme. Con una sonrisa de lado, él mordió su labio superior para contener la risa, o tal vez las lágrimas.
"Nunca te has visto más hermosa", dijo con una sonrisa. Sabía que era mentira. Ya no era la misma chica de hace un año. Mi cabello ahora llegaba más arriba de los hombros, mi piel estaba más blanca de lo usual, y no podía negar que mis ojos parecían dos parches rodeados de morado.
"Tienes suerte de que esta chica esté contigo", añadí, pasando la mirada a su rostro. Cole era completamente perfecto, con sus facciones asiáticas realzadas por su tez blanca, su cabello tan negro como la tinta, una nariz perfilada y una hermosa sonrisa. Ese hermoso rostro no lo podía llevar a la tumba conmigo, necesitaba conocer a alguien."
Cole se acercó a mí, tomó mis manos y las besó. No podía permitir que él continuara destruido, consumido por el cáncer, como lo estaba haciendo conmigo.
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Destellos de Miel: Renacimiento
RomanceLos destellos dorados de sus ojos mieles estaban cubiertos de lágrimas, su mirada estaba fija en mí, apenas podía sostenerme en pie. "¿Esto es lo que quieres?" le grito con toda la fuerza que puedo, aunque mi voz no ayuda mucho y se corta. "¿Quieres...