𝑈𝑟𝑢𝑎𝑦𝑜| 𝐷𝑎𝑛𝑖𝑙𝑜 𝑆𝑎𝑛𝑐ℎ𝑒𝑧 +18 [Pausada Temporalmente]

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Etapa N° 2: Enamorarse

Año 2000

Narra Danilo

Ese día yo estaba echo mierda... Mi hermano falleció, el Cochi, la Anabella, todos... Los únicos que me quedaban era Carlos y bueno, tal vez Emilia.

Ella es hermosa, sus labios, su pelo, su cuerpo, toda ella y bueno, ella es linda cuando yo estoy.

Sus ojos, nose como describirlos, siento que puedo caer dentro de ellos y ahogarme, sus ojos azules... Esos que brillan más que el sol, esos que se enchinan cuando sonríe, esos con pestañas largas, esos ojos, los más bellos de todos.

Eso pensaba hasta que me dormí por completo.

En mis sueños solo eran mil formas de como podrían haber matado a mi hermano y todas por mi culpa.

Deberia haber sido un mejor hermano, que cuando el haya conocido eso sacarlo de ahí, y no lo hice, todo era mi culpa.

Tenía que haber echo que el deje esa adicción...

No supe que hacer cuando me soñé la peor de todas, me levanté corriendo, Emilia estaba durmiendo, Carlos igual, me puse mi remera y mis zapas, dejé un beso en la cabeza de Emi y salí de su casa.

Llegué a la mía, busque la falopa que tenía mi hermano guardada, no sabía cómo prepararla o que hacer así que agarre un plato y lo mezcle con agua, eso me lo tomé.

Narra Emilia

-Mamá no está Danilo

-¿Cómo que no está? Llama a tu hermana

Sentí unos pasos acercarse, yo estaba levantándome

-Emilia, Emilia levántate

-¿Que paso Carlos? -Dije medio dormida-

-Danilo no está -Esas palabras hicieron que me levanté de golpe-

Me puse una remera, una falda larga y mis zapas, ellos desayunaron rápido y con mi papá fuimos a buscar a Danilo.

-¡Danilo!

-¡Danilo!

Corrimos por el nudo, llegamos a una parte y mi papá hablo con unos policías.

Tenía miedo ¿Si le había pasado algo a Danilo?

Cómo no aparecia fuimos a la casa, yo salí a caminar un rato a despejar mi mente, mientras mi hermano se preparaba para salir.

Me puse a pensar en Danilo, las veces que apenas podíamos caernos bien, cuando el nos hacía reír, siempre sacaba una sonrisa. Pase por su casa y escuché unos ruidos ahí, con miedo toque la puerta, nadie abría...

Toque por última vez y Danilo apareció detrás de ella.

-Emi... Perdón -dijo cerrando la puerta y yo puse mi pie-

-¿Cuál perdón? No hay perdón para esto

-No exageres, solo me fui a tomar aire -Dijo y vi sus ojos, sus pupilas estaban dilatadas, sus ojos rojos-

Abrí la puerta rápido y vi todo sucio, las paredes con grafitis, vi una nevera pequeña, la abrí y no habia nada, sabia que Danilo no había comido nada en dias.

-¿Hace cuánto que no comes?

-Yo si' he comido' no ve' -Dijo-

-¿Hace cuánto no comes?