Una luz en la oscuridad

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por Alondra

Notas de la autora (Abril 2024): Este fanfic fue escrito en 1999, sólo que para publicarlo en esta plataforma se le modificó el formato script que tenía antes, además de algunas correcciones.

Disfruten la lectura ^^

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El perder temporalmente un sentido dará una lección muy importante sobre la vida a una persona muy especial...

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Ya han pasado más o menos 5 años después de la derrota de Cell y la tierra vive en paz, una paz... largamente esperada para muchos de los habitantes que luego de los horrores vividos por culpa del monstruo, les era bien merecida. Todos nuestros amigos, y no me refiero a otros que a los Z Shenzi... vivían sus vidas normalmente, aunque algo opacadas por la ausencia de Goku, un amigo al cual todos querían y que rehusó regresar a la vida por voluntad propia, ya que así la vida en la tierra sería más tranquila, ya que el mismo dijo en una ocasión que su sola presencia era la causa de todos los problemas...

Capsule Corp. - Laboratorio de máquinas.

Bulma se encontraba arreglando un nuevo prototipo de un piloto automático, que supuestamente funcionaba sólo con la ayuda de la voz, y al parecer tenía algunos problemas...

- Rayos... - dijo la peliazul mientras apretaba unas piezas con una llave - ¡¿Por qué se ha vuelto tan complicado el arreglar este tipo de máquinas?!... es terriblemente exasperante y lo peor de todo es que no tengo a nadie que me ayude... si tan solo Vegeta... ¡Ah!, ¡pero que estoy diciendo!... ese saiyajin es incapaz de hacer otra cosa a parte de entrenar, luchar y comer... sin tan sólo usara parte de su energía en algo productivo... - murmuró molesta mientras secaba las gotas de sudor que caían por su frente con un pañuelo que luego procedió a guardar en su overol azul de trabajo...

De pronto Bulma sintió pasos en los salones contiguos acompañados de unas risas que se acercaban rápidamente. Sonriendo, ya se imaginaba quien podría ser...

- ¡MAMÁ! - se oyó una voz fresca e infantil - ¡YA LLEGUÉ!...¡MAMÁ!

- ¡Ah, hola cariño! - contestó Bulma mientras reanudaba su trabajo.

Era Trunks, quien ahora tenía 6 años, regresaba luego de una larga mañana en la escuela y por su semblante se le notaba muy contento.

- ¡Hola!.. ¿Qué haces, mamá? - preguntó mientras se asomaba a su lado mirando con curiosidad lo que hacía su mamá. - ¿Es un nuevo invento?...anda, dime...

- Es un nuevo prototipo de piloto automático, cielo... y estoy muy ocupada en él en este momento... ay... - dijo Bulma mientras apretaba una tuerca - Pero si tienes hambre, hay comida en la nevera lista para calentar... adelántate si quieres... yo iré en un rato...

- Uh... ¿No quieres que te ayude?... se ve divertido... - dijo sonriendo.

- Esto no es un juego, Trunks... mamá está haciendo algo importante y no quiero pensar en lo que podría pasar si metieras tus manitas aquí... pero cuando seas un poco más grandecito te prometo que te enseñaré a construir tus propias máquinas... - contestó la mujer sonriéndole.

- Está bien... - dijo el niño un poco desilusionado, pero al instante cambió su expresión - ¿Y mi papá?... ¿Dónde está?... quiero mostrarle lo que nos enseñaron hoy en la escuela...

- Ya sabes en dónde está... en la cámara de gravedad, entrenando como de costumbre... ¿en qué otro sitio de la casa piensas que podría estar? - dijo la inventora dedicándole una mirada a su hijo.

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