prólogo

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Sentía mi corazón intensificarse al punto de que mi respiración fuera cada vez más rápida.

Estaba cansado tan cansado que simplemente no podía contraer el sueño una vez más, como todas las noches.

Quería llorar pero simplemente algo dentro de mi me lo impedía, talvez era el echo de que mis ojos estaban agotados de tanto hacerlo.

Me encontraba en mi habitación de hospital como de costumbre, todos se encontraban dormidos pues el silencio era total.

Abrazaba mi almohada para poder tratar de dormir, pero me sentía incómodo porque esas voces volvían a comerme la cabeza, esos pensamientos terroríficos.

Tan solo me gustaría saber cómo se sentiría poder sentirte libre, pensé.

Quien diría que al siguiente día talvez el universo me escucho.

Pero no como lo esperaba.

Tus Ojos Azules //FREDDYTABO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora