Capítulo 2

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-¡Él empezó!

-¡Eso es mentira! -Dijo mi profesor mirando al director- ¡Ella es el diablo en persona!

-¡Basta! -Gritó furioso el director- Ahora explíquenme bien ¿qué pasó?

-Ella llegó tarde a mi clase -Dijo el profesor.

-¿Es cierto?

-Si pero ¡sólo fueron 3 minutos! -Bufé -Además, él dejó pasar a Gabriela.

-¿Y eso que tiene de malo?

-¡Gabriela llegó conmigo! ¡Ambas estábamos ahí y sólo la dejó pasar a ella!

-Escuchen -suspiró-. No puedo botarlos, usted es uno de nuestros mejores profesores -me miró a mí- y usted es una de nuestras mejores alumnas.

Sí, soy un cerebrito.

-Así que vamos a hacer esto -suspiró-. Cada vez que ustedes vengan a mi oficina con un problema nuevo pondrán un dólar en este frasco -sacó un frasco de un cajón.

-¿Escuchó? -Miré a mi profesor- Hay que empezar a crear problemas en su salón.

-Jones -gruño-. Cada vez que yo los escuché pelear pondrán un dólar -aclaró-. Pueden retirarse.

-Adiós señor director -dijo mi profesor antes de irse.

-Adiós Erick -reí y antes de abrir la puerta me di la vuelta y le dije- Y no te preocupes, comenzaremos a pelear en voz baja para que no escuches -salí afuera fe su oficina.

-¡Jones! -Escuché como gruñía.

Negué con la cabeza y reí mientras me alejaba. ¿Debería ir a clases? Estuvimos como una 1 hora discutiendo el problema así que solo me quedan 6 minutos de clase.

-No vale la pena -murmure. No pensaba ir a clases y mucho menos quedare aquí parada como idiota así que caminé hacia la cafetería y entré. Dudo que alguien me vaya a decir algo. Además, tengo hambre.

-Hola Roxi -Dije sentándome en una mesa frente a ella.

-¿No deberías estar en clases?

-Solo son 6 minutos -me encogí de hombros-. Además no vino el profesor de Matemáticas.

-¿Por qué?

-Perdió las llaves de su casa -reí.

-No te rías -intentó controlar su risa- ¿Y tú como sabes eso?

-Erick me contó.

-Tu relación con el director es demasiado extraña.

-Es mi tío -me encogí de hombros-. No puedo simplemente aparentar que no lo conozco y sé que él tampoco puede.

-¿Quieres comer algo? -Dijo dejando la esponja a un lado.

-¡Nutella!

-Ten -me dio el frasco-. No te la acabes, es la que Erick guardó.

-Me la comeré -me encogí de hombros y la campana sonó. Bufé- Me tengo que ir ¿me puedo llevar la Nutella?

-Sí pero si Erick me pregunta le diré que tú te la robaste.

-Me parece bien -reí-. Adiós Roxi.

-Adiós mi niña.

¿Qué clase me toca ahora? Ah sí, Matemáticas.

(...)

¡Al fin almuerzo! De seguro se preguntarán ¿qué hiciste esas dos horas? Y si no se lo preguntan igual les diré.

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⏰ Última actualización: Sep 07, 2015 ⏰

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