Cap 2: Un corazón destrozado.

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Cristian.

Sin duda nada podía salir bien en mi vida, primero tengo que estar en un hospital por un día entero y ahora resulta que nos tenemos que cambiar de casa y de ciudad por culpa del favorito de mis papás.

Ellos no iban a tomar en cuenta mi opinión, iban a preferir a mi hermano sobre todas las cosas, aún si eso implica destrozar más mi vida, a ellos no les intereso y me lo dejaron muy claro cuando me declare homosexual, más que todo mi padre por el daño físico que me hizo.

~Un año atrás~

-Mamá, papá, ¿Puedo hablar con ustedes? - Estaba muy nervioso por lo que estaba a punto de hacer, pero dicen que los papás siempre lo entienden a uno, a pesar de todo, uno sigue siendo hijo de ellos y no lo cambiarían a uno por una preferencia sexual, más bien le tomarían más amor a uno y lo cuidaría más para que nadie nos cause algún daño, pero este caso fue todo lo contrario.

- ¡Claro hijo, dinos! - Hablaron en unísono, entusiasmados por algún motivo.

- Mamá, papá, en realidad siento que necesito decirles esto, porque ya no me puedo callar más, los necesito más que nada, porque tengo miedo a lo que vaya a pasar luego de que hable- A este punto ya estaba llorando y se notó que mis padres estaban preocupados por mí, como si su hijo estuviera a punto de ser quebrado totalmente en pedazos.

- Dinos que tienes hijo, somos tus padres y siempre te vamos a ayudar en todo lo que necesites o lo que te pase. – No sabía que desastre iba a cometer después de decir esto y gracias a esa confesión todo iba a cambiar drásticamente para mí.

- Soy gay – La cara de mis padres cambio de una de preocupación a enojo, mi padre se me lanzo encima a pegarme y no dejaba de decirme “Esto es para que se te quite lo enfermo, yo no crie a un hombre que le gustan otros hombres.”

Mi madre no hizo nada, se puso a llorar como si le hubiera dado la peor noticia de este mundo, luego me miró y me dijo que era una decepción para ella y luego intento apartar a mi padre de mí, ya me había hecho suficiente daño, me dejó un labio roto y la nariz botando sangre como si fuera una llave botando agua.

-Eres una decepción para toda la familia - Hablo mi papá como si fuera la peor basura de este mundo, como si no fuera su hijo.

Mis padres me dejaron de hablar durante un mes y medio, tenía que cocinar y hacer las cosas por mi cuenta ya que los había decepcionado totalmente, al pasar los días me volvieron a hablar ya que decidieron no echarme de la casa porque aún era menor de edad, pero me dejaron muy claro que cuando tenga los 18 años cumplidos me debería de marchar de la casa.

~Actualidad~

Todos necesitamos un soporte en el cual podamos llorar, nadie merece que sus padres lo dejen solo cuando uno más lo necesita, ese fue mi casó y ahora estoy aquí con mis papás y el desgraciado de mi hermano, cumpliendo un capricho del menor de la casa, por un problema de él salimos todos perjudicados, en especial yo porque aquí tenía mi vida formada.

Tal vez no tenía muchos amigos, pero me sentía seguro aquí, en el instituto y a veces en mi hogar al lado de mi primo Abraham, que comparte la mayoría de gustos de ropa, música y actividades conmigo, solo así me sentía seguro y lleno por el maldito que mis padres dejaron en mí.

Ahora tenía que dejar Reino Unido e irnos para Los Ángeles en Estados Unidos, un lugar en el cuál sé que me va a costar adaptarme y seguramente tenga que vivir solo de ahí en adelante ya que ese año cumplo la mayoría de edad.

- ¿Enserio tenemos que irnos por el maldito problema de drogadicción que tiene Isaac?

- Ya estaba molesto de todo lo que mis padres estaban haciendo.

-No nos alces la voz, mira que por nosotros aún estás vivo, y si tenemos que ir hasta el fin del mundo por tú hermano lo vamos a hacer porque él no nos decepcionó como tú lo hiciste, así que cállate y respeta nuestra decisión – No podía decir nada más, tenían razón, quizás era un decepción para todos y por eso siempre me abandonan, por eso no tengo amigos.

Sentí bajar una lágrima por mis mejillas y me la seque rápidamente para que mi padre no lo notará y me recalcara la basura que soy.

-Entonces ¿Cuándo nos vamos? -

-Hoy mismo, ya tenemos todo, solo vamos a casa a recoger todas las maletas y nos vamos de una vez, antes de que sea demasiado tarde.

Escuchamos dos disparos venir de la parte de atrás del vehículo, una bala impacto en la ventana trasera del auto y en el parabrisas, sin ocasionarle daño a alguno de nosotros, la otra bala se perdió entre la carreta, la tercera bala impacto a mi hermano en el cráneo lo cual hizo que perdiera la vida inmediatamente.

El diálogo del amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora