Sus miradas se cruzan y hablan pero de sus bocas no sale nada, ni una onomatopeya o siquiera alguna palabra. El "hola" se vuelve pensamiento y el adiós un constante aliento, el "te extraño" que abraza mi cuerpo me asfixia tratando de consolar mi lamento, las acciones impulsivas causan eso y el sentimiento de culpa te persigue por dentro y aún que avanzar se intenta el arrepentimiento solo te frena en recuerdos.
Mi mente te busca y mi visita te encuentra, el cuerpo me tiembla pero mis piernas se congelan, el corazón me grita "anda y buscalo" pero mi alma solo cae en lamento ya que la realidad de la situación cae como bofetada callandolo y pidiendo tiempo.
Me siento en el asfalto mientras mi mente abre nuestro álbum de recuerdos, esos chistes, las calles y nuestros recorridos, dos almas en un mismo camino pero distintos destinos, tu risa y sonrisas quedan grabadas en cada foto, mi corazón pide cerrar aquel álbum pero mi mente solo quiere volver al momento y continuar para llenar aquel con más recuerdos.
De mi boca solo quiere salir un perdón pero se que en mal momento aquella palabra se queda irrelevante y a destiempo perdiendo el peso que realmente siento, quizá ya no haya un nosotros pero como dicen la esperanza es lo último que se pierde o al menos eso voy a pensar hasta que algo la pueda borrar.
Al lado mio aún hay un espacio en este asfalto que espera tu llegada al igual que yo, aun quedan espacios en blanco y boligoma para pegar más fotos nuestras y aun que haya posibilidades de que reciba un "adiós" mi corazón guarda esa esperanza de que esto sólo sea un hasta pronto para después estirar tu mano ayudándome a levantar y nuestro camino juntos continuar.
