Los orígenes de una pasión por el misterio

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Desde que era pequeña, siempre estuve obsesionada con los casos criminales. Pasaba horas viendo videos en YouTube sobre crímenes sin resolver y soñaba con ser la que los investigara.

En la escuela, no destacaba mucho, solo recibía reconocimientos por asistencia o por participar en obras de teatro. Pero todo cambió cuando llegué a la universidad a estudiar, ¿Pueden adivinar qué carrera elegí? Sí, periodismo.

Desde que me sumergí en esta apasionante carrera, mi dedicación y esfuerzo me catapultaron hacia la excelencia. Obtener becas por mis logros académicos y formar parte destacada del centro de alumnos.

Siempre busqué destacar en el campo del periodismo, y en mi cuarto año de estudios, llegó el momento crucial de elegir una especialización. Sin dudarlo, opté por el periodismo policial, ansiosa por adentrarme en los misterios de casos de robos y asesinatos que yacían sin resolver.

***

- ¿Amiga, conseguiste práctica? - fue la primera pregunta que me hizo Rosario, o más cariñosamente conocida como Xaro, al reunirnos para tomar un café. Aunque es dos años menor que yo, está inmersa en sus estudios de Derecho, y al ritmo que llevamos, ambas estaremos graduándonos el mismo año.

-La verdad es que no. Me estoy frustrando. Tanto estudio, tantas buenas notas, ¿para esto? ¿Para tener que rogarles a las personas que me acepten? Ya estoy aburriéndome. He ido a canales, he llamado a medios, a diarios, y todos me responden con un simple 'gracias, te llamaremos'-.

-Amiga vas a encontrar y serás la mejor, lo se-.

Y era verdad, sabía que era la mejor en lo que hacía, pero ¿por qué nadie más lo veía? Estoy en cuarto año y es momento de hacer mi práctica profesional.

Paso horas buscando en Google lugares que podrían necesitarme, pero nadie me llama, nadie parece quererme trabajando a su lado. ¿Quizás no soy lo suficientemente buena para esto? Pero, ¿cómo podría ser eso cierto? He trabajado duro, he dedicado tiempo y esfuerzo a mi formación. Debo recordar que mi valía no se reduce a la respuesta de los demás en este momento. Mi tiempo llegará, solo debo seguir buscando y manteniendo la fe en mí misma.

Mientras me masajeo la sien, siento la vibración de mi celular, número desconocido.

- ¿Javiera? -..

- ¿Sí?, ¿Con quién hablo? -.

-Hola, espero que estes muy bien, me presento me llamo Ricardo y te estoy llamando porque me llego tu curriculum y por lo que se estas buscando práctica, ¿Ya encontraste-

-¡¡¡Hola!!!, no todavía no-.

-Bueno te estoy llamando para ofrecerte una oportunidad, somos un medio independiente y queremos que hagas tu practica con nosotros, partirías este lunes a las 9 am ¿Te parece? -.

-Si, muchas gracias de verdad, busque en muchos lugares, gracias por confiar en mí-.

-Jaja bien nos vemos el lunes-.

-Ok-.

Corté la llamada y corrí a contarte a mi mamá con lágrimas en los ojos que después de meses buscando por fin ya había encontrado la práctica profesional.

***

Mientras estaba en la oficina, subiendo noticias al medio de comunicación donde estoy realizando mi práctica, me embargaba una mezcla de emoción y anticipación. Con solo un día restante, reflexionaba sobre las valiosas lecciones aprendidas y los lazos de amistad que había cultivado.

De repente, interrumpió mis pensamientos la voz de mi jefe llamándome. -Javiera, ¿podrías pasar a mi oficina? -, me solicitó.

Mientras caminaba hacia su despacho, mi mente se llenaba de preguntas sobre qué podría estar pasando. ¿Habría cometido algún error?

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⏰ Última actualización: May 30 ⏰

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