Los sentimientos.

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Los sentimientos son algo raros, trabajan de una manera que nadie entiende. Muchos se sienten confundidos al experimentar algun sentimiento, otros ya se los esperaban y saben como manejarlos. Para el caso de Nico era algo normal, no estaba confundido ni preguntandose por que se sentía de esa forma. Ya lo había experimentado con el chico de ojos de color mar, Percy. La única pregunta para él era, por qué ese sentimiento tan especial se estaba enfocando a esté chico que simplemente representaba la palabra "idiota" en su vocabulario? Y no se refería a Jason, o a Leo, no. Era a esté chico con el que había tenido charlas largas, el que había atendido sus heridas de batalla y que había clasificado en la categoría de amigo. Will Solace simplemente era eso, amigo. Nico ya había llegado a la conclusión de que sólo lo veía como tal. Por qué ahora su corazón decía lo contrario? Latía con fuerza cada vez que Will se acercaba para decir tan sólo unos buenos días. Nico no se enojo, ni se asusto, cuando se dio cuenta de lo que pasaba. Estaba enamorado otra vez.

Ahora bien, cómo podía decirle lo que sentía a esté chico? Si se lo decía podría pasar por un momento vergonzoso. No temía por ser rechazado, temía que Will se lo tomara en broma y no le creyera al respecto. Si no dejaba las cosas en claro se sintiría peor. Si bien ahora, lo primero que tenía que pasar era conseguir un tiempo a solas con Will, la enfermería no era un buen lugar, siempre se llenaba de campistas heridos de una u otra forma. Era como si ese lugar nunca hubiera estado vacío. La cabaña de Apollo tampoco era buena idea. Lo único que le quedaba era citar a Will en su cabaña, claro, un ambiente tan oscuro sería perfecto. Estaba viendo las cosas positivamente, primero al dirigirse al comedor, se encontró con la sorpresa de que Will estaba solo. Genial, al parecer estaba siendo favorecido por los dioses. Se acerco hasta la mesa, Will estaba distraído comiendo. Nico se sentó enfrente de él, incluso su corazón latía con fuerza en ese momento. Will levanto la mirada y le sonrió alegremente. Tenía que ser hijo de Apollo, su sonrisa quemaba igual que el Sol. Nico no hizo gesto alguno, hizo un ademán con la mano para que siguiera comiendo, a lo que Will obedecio. Nico suspiro, pensando en cada palabra y silaba que diría, quería que Will se diera cuenta de que habla en serio. Cuando al fin había repasado toda su confeción, volvió a mirar a Will y dijo:

-Will, deja de comer y escucha. Tienes tiempo libre ahora?

Will levanto nuevamente la mirada, sonriendole, otra vez. -Claro, de hecho esté es mi descanso de la enfermería. Muchos campistas están llegando lastimados de sus practicas de flecha y arco. Son novatos, desde luego.

-Entonces ven conmigo a mi cabaña. Tengo algo muy importante que decirte.- Nico se levanto del asiento, mirando fijamente a Will, el cual también se estaba levantando. Todo estaba marchando bien, tal vez alguien le tuvo piedad y hacía que el plan de Nico estuviera funcionando.

Incluso Nico se dijo a sí mismo esa frase que parecía más una maldición, "todo está saliendo bien". Cuando ya estaban a punto de llegar a las cabañas, sonó aquella melodía que Nico había prestado atención, hasta ese momento. Era el momento de jugar a "capturar la bandera". No lo podía creer, en un momento como ese. Miro a Will, el cual estaba concentrado viendo a donde iban algunos campistas.

-Si quieres ir a jugar, ve. Si mañana tienes tiempo libre otra vez, buscame en mi cabaña.

Nico continuo caminando, unos cuantos pasos y sintió la mano de Will sujetandolo del brazo.

-Quieres venir a jugar conmigo? Nos aliamos con la cabaña de Ares y así nos evitamos algunas visitas a la enfermería.- Will le sonrió, y como le decía no a esa sonrisa?

Ahora un nuevo escenario se plantaba en la cabeza de Nico. Muchos podrían optar por pelear durante el juego pero muchos preferían el factor sorpresa. Si lograba convencer a Will de eso, tendría la oportunidad de hablar con él.
El juego comenzó, la estrategía sorpresa convenció a Will. Encontraron una barricada cerca de arboles, perfecta para esconderse. Ahora bien, el lugar no se veía tan bueno para una confesión. Ambos se sentaron en la tierra, Will se quedo mirando la poca iluminación del cielo. Ambos se quedaron callados, cuando Nico al fin iba a decir algo, Will hablo primero:

-Me gusta esta parte del día. Cuando el Sol se oculta y la Luna sale.

-Favoritismo a tu tía?

Will se rió con ese comentario. -Simplemente siento que la Luna tiene más resplandor que el Sol.

Nico lo miro, tenía un brillo diferente en los ojos. -Tal vez se equivocaron y eres hijo de Artemisa, claro, si se pudiera.

Will bajo la mirada al suelo y puso una sonrisa. -Creo que si fuera así, ella preferiría una hija y no un hijo.

Ambos se rieron, bueno, Nico sólo sonrió. Will volteó a verlo, aun tenía un brillo en los ojos que lo hacía ver más apuesto.

-Nico, sé que tenías al que decirme, pero creeme que lo mío es más importante.

Nico asintió. Dejando que Will continuara hablando. -Para serte sincero, ya no eres un amigo, para mi haz pasado a ser otra cosa. - Nico se quedo callado.

Un largo silencio envolvio el momento, incluso se dejaron de oir los sonidos de las pisas de los demás mestizos. Nico respiro hondo y volteó a mirar a Will.

-Tú también haz dejado de ser un amigo para mi, no importa como lo vea.

Will se acercó a Nico, éste se puso tensó al sentirlo tan cerca. Ambos respiraban un poco nervioso, Will estaba muy cerca de la boca de Nico, que sin dudarlo, le dio un beso suave. Nico se sorprendio pero no lo alejo, estaba deseando más, lo haló del brazo dandole un beso más apasionado. Will correspondió, rodeando con uno de sus brazos la cintura de Nico. Se sentía tan bien, pero poco a poco se amargó al oir los pasos agitados de gente que se acercaba. Ambos se separaron, fueron rodeados por hijos de Atenea quienes sonreía muy felices.

A momentos de regresar a las cabañas, Will no podía dejar de sonreir mirando a Nico, el cual estaba sonrojado hasta las orejas. Will lo tomo del brazo sólo para susurrarle al oído algo muy importanto.

-Mañana tendré mucho tiempo libre.

La seriedad de los sentimientos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora