15/04/2020
Taehyung se sentía bastante nervioso todavía. Cuando llegó al salón de clases fue directamente hacia su asiento sin mirar a nadie, en especial, a ella, quien ya estaba ahí y que parecía estar entre tranquila y molesta.
Las clases llegaron a su fin y de la misma forma que el día anterior, todos abandonaron el salón excepto Mina y Taehyung.
Él estaba a punto de irse, pero en ese momento se frenó. Pasara lo que pasara, era el momento de dejar de ser un mentiroso y un cobarde. Se dirigió hacia Mina hasta quedar frente a ella.
La pelinegra lo miró con seriedad, con incredulidad, con tristeza. Sacó la libreta de su mochila y empezó a hablar.
-¿Crees que es gracioso?- preguntó con coraje- ¿A qué estás jugando esta vez? ¿Esperas que con este cuaderno y todo lo que dice en él te perdone así como así? ¡Responde, Taehyung!
El chico solo se quedó en silencio, intentando encontrar las fuerzas suficientes para hablar.
-Bien, si no vas a decir nada, ten tu estúpida libreta.
Y antes de que ella le aventara la libreta y se fuera, Taehyung se agarró bien los pantalones y por fin habló.
-No te vayas, no aún hasta que me escuches.
-Pues habla, estoy esperando. ¿Qué es esto? -cuestionó con la libreta aún en su mano- ¿Por qué? ¿Por qué hasta ahora?
-No pensaba dártela realmente, pero una parte de mí quería que leyeras lo que estúpidamente en palabras no sé expresar. Todo lo que está escrito ahí es verdad. Perdón por todo, por haberte lastimado, por haberte mentido, fui un verdadero idiota y lo acepto. Acepto mi culpa y recibo lo que me merezco por imbécil sin reproche. Sé que me equivoqué, pero estoy aquí ahora, arrepentido y pidiendo una oportunidad más. Si tengo que volverme católico de los que va a la iglesia a diario, lo haré. Si tengo que dejarme golpear hasta morir, lo haré. Cualquier cosa que tú me pidas lo haré. Todo por conseguir tu perdón y que me des una segunda oportunidad para estar juntos. Te juro que jamás volveré a hacerte daño.
Y por fin lo dijo, aquellos sentimientos que estuvo guardando desde hace tiempo. Lágrimas empezaron a recorrer en los rostros de ambos chicos y un silencio inundó aquel salón de clases.
-Yo de verdad...
-¿Por qué hasta ahora, Taehyung? -lo interrumpió- ¿Sabes cuántas veces lloré buscando en mí misma una explicación de por qué habías sido tan cruel conmigo? ¿Sabes cuántas veces me dolió que mantuvieras tu fachada de chico malo frente a todos después de deshacerte de mí? ¿Sabes cuántas veces volvía y volvía a pensar en todo lo que pasó? ¿Alguna vez pensaste cómo me iba a destrozar tu mentira? Te aseguro que no tenías ni una pizca de idea, ¿Y esperas que te perdone tan fácil?
La chica no solo estaba molesta, estaba dolida. Se había resignado en la espera del arrepentimiento del chico y estaba intentando aún sanar el dolor en su corazón, y que ahora Taehyung le dijera esto realmente se desestabilizó emocionalmente.
-No lo pensé en el momento y estuvo mal, lo sé. Todos los días me he arrepentido desde que me di cuenta cuan enamorado estoy de ti y de que te había perdido, de que eras mía y te perdí, de que era feliz contigo y te dejé ir. Soy un idiota, pero si me das la oportunidad, te prometo que no descansaré hasta demostrarte que he cambiado para bien -dijo el pelinegro-.
El silencio volvió a aparecer. Taehyung iba a volverse loco. Estaba perdiendo la esperanza. Mina solo miraba el suelo, como si buscara una respuesta en él.
-No te creo, pero... Te perdono. He estado esperando esa disculpa por mucho tiempo, no tanto por ti y lo que haya pasado entre nosotros, si no por mí misma. Tú no sabes realmente cómo me afectó todo lo que me hiciste, cómo me afectó el que me dijeras que fui un juego cuando estaba tan perdidamente enamorada de ti. Todo este tiempo he estado buscando la paz en mi corazón, pero el rencor era demasiado grande hacia ti. No sé si deba perdonarte, pero mientras eso me alivie a mí, está bien. Taehyung, si de verdad me amas tanto, te pido que te alejes. Haz de cuenta que no existo, que no somos compañeros de escuela, que nunca pasó nada; entonces te creeré que has cambiado para bien. Si de verdad estás dispuesto a hacer lo que sea por mí, sanate a ti mismo. Sana y sé mejor persona.
Tae al escuchar eso se quebró. El nudo en su garganta era inmenso. El dolor que sentía en ese momento no se le comparaba a ninguno.
-¿De verdad quieres eso? -preguntó el chico con la voz temblorosa-.
-Sí. Es lo mejor para los dos y para darle fin a lo que una vez fue un nosotros -respondió Mina-.
-Bien, entonces me alejaré para siempre de tu vida. Adiós, Kim Mina.
-Adiós, Kim Taehyung.
Y sin más que decir, Mina salió primero del salón, sintiéndose liberada después de dejar ir todo el rencor que había dentro de su corazón, cerrando a su vez un capítulo que fue muy importante en su vida.
Taehyung salió después, dejando escapar una que otra lágrima. Por un momento se sintió destrozado porque Mina no le había dado una segunda oportunidad para estar juntos,aunque no todo fue en vano, ella lo perdonó y hasta le pidió sanar. Era un promesa que estaba dispuesto a hacer, sanar. Dejaría mentir al respecto frente a los demás y sanaría para mejorar como persona.
Muchas veces cuando tenemos la culpa en algo que nos equivocamos, preferimos mentir o echar culpas a otros en vez de pedir perdón, y muchas otras veces es necesario saber perdonar, pero preferimos no hacerlo para vengarnos o quedarnos con el rencor; sin pesar que pedir perdón y perdonar sanan, y que necesitamos sanar antes de perdernos a nosotros mismos.
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𝙀𝙭𝙥𝙚𝙧𝙩𝙤 𝙢𝙚𝙣𝙩𝙞𝙧𝙤𝙨𝙤
FanfictionDonde Taehyung le escribe en una libreta a su amada princesa, expresándole todo lo que le gustaría decirle frente a frente, aunque en público él sea un experto mentiroso. -No copias ni adaptaciones. -Historia completamente mía. -Si no te agrada esta...