'¬°Affogato Cookie x T/N°¬'

Lágrimas Silenciosas.

Tal vez, si llevas un tiempo por aquí, ya hubieras precenciado este mismo mensaje: "esta es mi primera historia".
En este caso, pasa exactamente lo mismo. Solo que esta vez podría tenerme un poco de fe. Tal vez vayas a disfrutar de esta pequeña historia.
Quien sabe, tal vez... Te llegue a gustar esto, aunque yo no esté muy seguro...)

En la nieve, en la tormenta, en las montañas. En algún lugar más allá de las penumbras congeladas. Un lugar deshabitado y desolado, si no fuera por una pequeña galleta...

En medio del lugar yacia una pequeña cabaña de madera, en la que vivía T/N y su madre.
La vida no era fácil, la comida escasea bastante y el frío gélido los congela. Pero aun así se las arreglaban para vivir...

Como la cabaña estaba en una montaña, T/N debía forzosamente caminar una hora hasta la tribu más cercana. Solo para buscar trabajo.

Uno de estos días, la madre de T/N había caído enferma.
Obligada a quedarse en cama, no tenía otra opción más que esperar a que T/N consiga trabajo. Era su esperanza...

Después de la caminata del día para llegar a la Tribu del Café, T/N se esforzaba para conseguir algún empleo. Le preguntaba a cualquiera que viera en su camino, iba a algunos locales para intentar conseguirlo. Pero por cada hora que pasaba, parecía que ese esfuerzo sería en vano.

T/N empezaba a estresarse un poco. Tener que cuidar a su madre que con cada día empeoraba más, buscar trabajo incansablemente y aun así sin éxito.
Con esta falta de oficio, los dos no podrían comer.

Sin trabajo, sin comida, sin salud. Nada podría estar peor... ¿Verdad?

Después de otro día agotador, T/N regresaba a casa. Al parecer su madre la estaba esperando.

-Madre de T/N: Alfin llegas... ¿Tuviste suerte...?

- No... La verdad empiezo a creer que nunca podré encontrar trabajo.

-Madre de T/N: No digas eso... Se que podrás.

la madre de T/N sonríe débilmente, pero luego empieza a toser

- ¡Mamá! ¿Estas bien?

-Madre de T/N: Si... Estoy bien, no te preocupes por mi...

-¿Por qué no debería preocuparme por ti?

-Madre de T/N: es que... Se que estaré bien... Solo se que ya llegó el momento.

-¿el momento de que...?

La madre de T/N toma su mano

-Madre de T/N: ...El momento de envejecer.

*T/N se queda en silencio por un momento antes de fruncir el ceño*

-por favor... No digas eso...

La madre de T/N le acaricia la cabeza débilmente, pero T/N solo baja la mirada mientras unas pequeñas lágrimas empiezan a salir de sus ojos

-Madre de T/N: Mi pequeñ*... Cuanto has crecido...

- ...

-Madre de T/N: Se que podrás hacerlo sin mi...

T/N empieza a llorar silenciosamente, pero se queda en silencio al no saber que decir

-Madre de T/N: No te pongas así... Sé que estarás bien...

-No...

T/N se seca las lagrimas y mira fijamente a su Madre con determinación

-Yo... ¡Yo prometo que te cuidaré, no importa si no tengo trabajo!

La madre de T/N se queda algo sorprendida, pero solo sonríe

-Madre de T/N: yo confío en ti...

Esas fueron sus últimas palabras antes de quedarse dormida. Al ver esto T/N también se fue a dormir, preparándose para el día siguiente...

El día había empezado y T/N se despertó temprano, como siempre, para buscar trabajo. Caminó por una hora hasta la Tribu del Café y empezó a hacer lo de siempre, solo que esta vez había algo inusual en el ambiente.

Todo estaba muy quieto y silencioso, el lugar se volvía algo lúgubre y melancólico, como si hubiera pasado una tragedia.

T/N se sentía extraño/a, tanto así que decidió llegar a casa temprano. Comenzó el largo reccorido hasta la cabaña para encontrar algo... No tan bueno.

A lo lejos se podía oír disturbios en la casa, como si alguien estuviera desordenando todo desesperadamente. Seguido de un grito desgarrador.

-¡¡¡MAMÁ!!!