25.

187 24 5
                                    

By Tom.

—Eh...chicos, ¿por qué no vamos al sofá?, ¡ustedes ya deberían estar durmiendo mocosos!, vamos, tienen que irse a dormir, ¡arriba!—Los dos pequeños le miraron con duda, ¿dormir en la tarde? Bill era más que raro en algunas ocasiones; no se quejaron y simplemente subieron a su habitación.

Mi vista estaba completamente fija en aquel chico, ¿qué hacía él aquí? y peor, ¿qué hacía con Bill?; caminé hasta el sofá tomando asiento con una ligera incomodidad presente, me imaginaba que ese chico después de salir ni siquiera recordaría a Bill, o incluso que Bill no recordaría nada, después de salir como un loco de mi casa asumí que no tendría mente para más, me equivoqué al parecer.

—¿Quieren hacer algo?...creo que podríamos ver una película o algo así..

—Yo tengo que irme, Bill. Igual, mañana puedo venir a cuidarlos nuevamente, nos vemos.—Aquel chico se acercó hasta Bill besando su mejilla, se despidió de mí con un asentimiento de cabeza y sin más, salió de la casa y junto con él mi sentimiento de incomodidad.

—¿A qué vino?

—A cuidar a mis hermanos...no podía dejarlos solos y menos en esta situación.

Asentí suavemente palmeando mi lado izquierdo en el sofá indicándole que se sentara, rápidamente lo hizo y se abrazó a mí soltando un suspiro pesado, algo le pasaba, ¿o quizá estaba demasiado cansado?; no tenía ni la más minima idea de cómo sobrellevar todo, teníamos que empezar de cero nuevamente, tenía que conocer al nuevo Bill, tenía que aprender a leerlo nuevamente.

Todo me estaba jodiendo el plan.

—Tom..

—¿Uhm?

—¿Te gusto?

Elevé una ceja ante su pregunta antes de mirarlo fijamente, lo esperé más de medio año, le ayudé a salir de ahí y traté de investigar todo...¿realmente me lo preguntaba?; tomé sus mejillas entre mis manos soltando un pequeño suspiro antes de negar finalmente, él bajó la cabeza desilusionado y yo únicamente me acerqué a besar su frente.

—No me gustas Bill, es mucho más que eso. Desde el primer día que hablamos sabía que me enamoraría completamente de ti, eres el ser más hermoso que pude conocer, y a pesar de haber sufrido tanto, sigues igual de sonriente.

Al instante su rostro se iluminó, y es que todo lo que decía era cierto. Todo en él me fascinaba, estaba completamente muerto por él, cada vez que respiraba cerca mío era como si me enterrara cuchillos de amor justo en el pecho, su voz era como la melodía que necesitaba para saber que estaba vivo, y su tacto...me hacia creer en la misma reencarnación.

—¿Por qué?...lo estuve pensando y... ni siquiera nos conocemos bien, Tom.

Error, tú no me conocías a mí.

—No es necesario conocerte de toda la vida como para estar seguro de lo mucho que te amo, Bill. Mi conexión contigo es sumamente especial, ¿no la sientes acaso?, tú y yo estamos más que destinados a estar juntos...cueste lo que cueste.

No lograba entender su expresión, era sumamente extraña y confusa, ¿no lo había conmovido lo que dije?, él simplemente cerró los ojos y suspiró una vez más, estaba pensando en algo, pero yo no sabía en qué, no aún. Sus brazos rodearon mi cuerpo y en menos de dos segundos ya estaba encima mío, sin ningún tipo de morbo, solo era Bill intentando evadir sus dudas mientras me abrazaba, mis manos subieron hasta su cabeza para poder dejar caricias suaves y lentas, podía sentir que estaba un poco incómodo o incluso que algo lo inquietaba, pero no iba a preguntar nada.

Podía enterarme solo.

—Tom..

—Dime, belleza.

—¿Por qué siento que me ocultas algo?, ¿hay algo que deba saber?

Mis caricias se detuvieron en seco ante sus cuestionamientos, ¿qué le respondía?; simplemente yo sabía más cosas de él que él mismo, suspiré un poco para continuar con los mimos negando con la cabeza finalmente, no le ocultaba nada...nada que le hiciera daño, no mucho.

—Para nada, solo estás un poco aturdido, pero cuando se pase te aseguro que estarás bien y esas preguntas van a desaparecer de tu cabeza.

—¿Crees que solo es producto de mi cabeza?

—Posiblemente, Billy. Posiblemente.

Ninguno de los dos dijo algo durante las próximas horas, nos mantuvimos abrazados y en silencio, un silencio cómodo y que posiblemente ambos necesitábamos, yo pude pensar bien las cosas, y él...él pudo seguir en su mundo por un buen rato más, al inclinar mi cabeza pude notar que estaba completamente dormido, tenía una dulce cara de angelito, una que muy pronto me iba a servir nuevamente, pero tenía que ser muy cuidadoso. Suspiré de manera pesada levantandome con mucho cuidado para no despertarlo, durante el camino a su habitación pude notar lo ligero que era, no lo recordaba así; negué suavemente entrando en aquel cuarto recostando su cuerpo sobre la cama mientras le veía atentamente, era realmente hermoso y sureal, por algo salía tan bien en las fotos.

Dejé un beso sobre sus labios antes de sonreír y salir de la habitación para poder dirigirme a la puerta principal; ahora estaba más que convencido, Bill tenía que ser mío únicamente, costara lo que costara.

Al salir de la casa caminé con rapidez hasta mi auto, al entrar vi todo el historial de llamadas perdidas en mi celular haciéndome formar una mueca, todas eran exactamente del mismo número. Vacilé un poco antes de simplemente marcar y pegar el celular a mi oreja, sonó un par de veces y sin más, me contestaron.

—¿Y bien?, ¿qué material hay para hoy?

—Por el momento no va a haber material, creo que comienza a sospechar, es mejor que nos mantengamos prevenidos.

—Son simples fotos, Tom. ¿Realmente crees que se enoje por ello?, además las fotos solo las ves tú, nosotros solo imprimimos y ya.

—Da igual, seguirán recibiendo dinero si eso es lo que les preocupa, si llegan a descubrirme va a ser su culpa, y recuerden que yo tengo un abogado a la mano.

Colgué la llamada aventando el celular al asiento del copiloto, me coloqué el cinturón de seguridad y encendí el auto para empezar a conducir, sin bien como él había dicho, solo eran fotos, esas fotos me trajeron problemas a Bill. Realmente mi intención jamás fue hacerle un daño, solo era un chico obsesionado con él, ahora soy lo mismo, con la diferencia de que está a nada de ser mío.

O más bien, ya era mío.
.
.
.
.
.

Volví, realmente me quiero disculpar por este tiempo de ausencia, no me sentía nada bien en el aspecto emocional así que tuve que retirarme un tiempo, pero ya estoy de vuelta. ¿Qué tal la historia? ¿les va gustando?, si tienen alguna duda, sugerencia o algo parecido no duden en comentarlo, ¡los amo!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 20 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

I Can't See You (Toll)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora