Una nueva vida

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Pov Ayanokouji

Después de la breve charla con Raynolds, me levanté de la silla y me dirigí hacia la recepción. El reloj en la pared marcaba los minutos restantes antes de que abriéramos oficialmente.

Debía admitirlo, sentía un poco de nervios. Las habilidades sociales no son mi fuerte y la poca experiencia que adquirí en esos pocos meses dentro de la preparatoria, no eran suficientes para llevar a cabo un trabajo como este, en donde hay que ser expresivo.

Pero bueno, no es como si no pudiera entablar una charla casual y formal, ¿Qué tan difícil puede ser dar una llave a las personas?

Con eso en mente, me detuve frente al mostrador, esperando el momento en que empezarían a llegar los huéspedes. Las llaves de las habitaciones estaban organizadas en pequeños ganchos, cada una etiquetada con un número.

Justo cuando estaba a punto de verificar el inventario de suministros, escuché pasos acercándose. Volteé y vi a una mujer de entre 25 y 30 años de edad, con una sonrisa amable en su rostro. Llevaba una maleta y parecía un poco cansada.

- ¡Hola! -dijo, extendiendo la mano-. Mi nombre es Yui Himeko . ¿Eres nuevo? Anteriores veces no te había visto por aquí.

¿Anteriores veces? Así que es una cliente habitual en esta posada... No me extraña, no es que haya muchos lugares para pasar la noche en este pequeño pueblo.

- Sí, lo soy- Respondiendo a su pregunta, asentí ligeramente - Un gusto conocerte, mi nombre es Ayanokouji Kiyotaka. Bienvenida. ¿En qué puedo ayudarte?-

Yui me explicó que había reservado una habitación para una conferencia cercana y necesitaba registrarse.

Mientras procesaba su información, noté que tenía una pequeña mancha en la manga de su blusa. Sin pensarlo mucho, tomé un pañuelo que venía con el traje y le ofrecí limpiarla.

- Oh, gracias -dijo, sorprendida- Eres muy atento, Ayanokouji - finalizó su agradecimiento con una sonrisa

Bueno, debía ser atento, es mi trabajo aquí de todos modos.

- Si necesitas ayuda, no dudes en preguntarme a mí o al resto del personal- Dije eso a la vez que le entregaba la llave de su habitación.

- Definitivamente lo tendré en cuenta- Yui asintió con gentileza mientras tomaba la llave de la habitación. Miró a su alrededor, observando el vestíbulo con detenimiento, y luego volvió a centrar su atención en mi- ¿Podrías recomendarme algún lugar cercano para desayunar? Estoy buscando algo delicioso jeje-

Mierda. No conozco bien la comida de este mundo, apenas y vi algunos platos de reojo mientras caminaba el día de ayer. De hecho, ni siquiera he probado un solo bocado de comida desde que llegué aquí.

Lo bueno es que memorice todas las calles por las que pasé hasta llegar aquí, y sé que hay un restaurante a unas pocas calles de este lugar.

No sé qué tal será el sabor, pero ayer habían bastantes personas dentro, así que algo de buena reputación debe tener.

Si fuese otra situación no me importaría, pero si quiero seguir quedándome en esta posada, no puedo recibir quejas ni una valoración mala por parte de los clientes.