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 En toda la noche no pude pegar un ojo... Caminando con pereza hacia el baño para comenzar mi rutina de mañana

—Jennie Kim, no creas que te liberaste del cuestionario— escucho a jisoo golpeando la puerta.

Viro los ojos, cepillándome los dientes con sueño; ya no habrá manera de ocultarle o inventarle otra excusa, me tendré que comer el sermón y las acusaciones, llamándome egoísta e irresponsable; escupo la pasta dental, meto la boca de bajo de la canilla sorbiendo agua haciendo buches y escupir lo restante de suciedad.

Al salir del baño, voy hacia la habitación vistiéndome rápidamente con el uniforme, al terminar camino hacia la habitación de Susan, pero esta no está acostada como debería estarlo; viro los ojos caminando hacia el comedor, encontrándome con los dos ancianos, sacando de las cajas los frascos de marihuana. Mi mirada somnolienta cambio a una completamente confundida

—¿Pero qué mierda están haciendo?— los dos giraron la vista hacia mí, refunfuñando, siguen sacándolo —¿por qué lo sacas??, es un pedido.

— Tú crees, que voy a permitir que sigan vendiendo esta mierda??.

Jisoo tomo un frasco pequeño, tirándolo a la caja que sostenía Richard; la morena vira los ojos con fastidio, su mal humor iba empeorando por cada segundo

—Esta mierda como tú la llamas, querida hermana ... — dijo quitándole la caja Richard con brusquedad, metiendo la mano en ella para sacar un frasco y señalar con él a la castaña— nos ha sacado de las putas deudas y..

—Pues prefiero estar endeudada hasta los cojones que vender doga— la frenó, arrebatándole el frasco de la mano, tirándolo nuevamente a la caja— MALDITA SEA JENNIE.. AYER VINO EL MALDITO ASISTENTE SOCIAL ... ¿EN QUÉ PENSABAS??. QUIERES QUE TE LLEVEN A UN MAL..

— CARAJO JISOO, DEJA ESE MALDITO SERMÓN, YA CUMPLIRÉ LOS DIECIOCHO Y NO PODRÁN LLEVARME — gritó, hacia la mayor, quedando a dos centímetros meneando la cabeza — esto ayudo mucho a la familia y a la casa... Y nadie nos  acusará.

—Ahora ya entiendo por qué pediste ese maldito certificado en el hospital— exclamo cabiz baja, en su rostro se podía apreciar la decepción y la primera en darse cuenta fue jennie quien trataba de que ese gesto no la doblara— yo lo tenía todo controlado, conseguir un buen empleo y mantenernos a los cuatro con el estómago lleno y la maldita casa protegida; pero a ti, te importa una mierda, ya que siempre haces lo que quieres sin darte cuenta a quienes perjudicas — la morena tenía los ojos clavados en la mirada decepcionada de su hermana mayor, su intención no era esa, pero ya no dará más explicaciones sabiendo que jisoo no la escuchará— los manoban me van a aumentar el sueldo, y vamos a poder..

—YA BASTA JISOO— cortó jennie ya sin poder controlar su humor— ese maldito sueldo no se compara con lo que hacemos— la mayor vira los ojos, fastidiosa, se cruza de brazos sabiendo que su hermana es muy cabeza dura para ponerse en su lugar— deja de creer que debes ocuparte de nosotros... mierda jisoo solo tienes dieciocho malditos años... no puedes solo dejar tu vida atrás para hacerte cargo de algo que no te corresponde— la mayor se muerde el labio inferior sin quitar la mirada de la menor— quítate esa mochila que no es tuya... No te pertenece, no deberías hacerte cargo.

—Jennie por favor... quién se hará cargo entonces?? ¿Acaso soy la única madura en esta casa?? — exclamó arreglándose el cabello

—sé que crees que es tu deber... pero no es así, no tienes por qué hacerlo sola— su celular vibro en su bolsillo, lo agarra rápidamente adivinando de quién era el texto

Lily 🐣

-"ya estoy afuera, lindo sábado para pasarlo en el instituto"

pudo leer su sarcasmo, le envió un sticker de un perro llorando en una esquina, bajo el celular y se quedó mirando a jisoo

"como quieras kim"    JENSLISA (Lisa Gip) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora