HESTIA

HESTIA

En la mitología griega, Hestia es la venerada diosa del hogar y la armonía familiar además de ser considerada la guardiana del hogar y el fuego sagrado. Su presencia brindaba calidez, seguridad y estabilidad a los hogares griegos. Asimismo, simbolizaba la armonía y la unidad familiar. Su culto era esencial en cada hogar, donde se le rendían honores y se le ofrecían sacrificios para asegurar la felicidad y la prosperidad en la vida cotidiana.

Dicha diosa, actualmente se encontraba con una mirada muerta con lágrimas cayendo de sus hermosos ojos mientras observaba una pequeña cabaña en llamas teniendo en sus brazos el cuerpo muerto de una joven de alrededor de 16 años que presentaba signos de haber sido violada si su ropa rasgada era un indicativo de lo sucedido, por lo visto la joven había intentado defenderse, pero al final no pudo hacer nada mas que suicidarse.

Hestia sabia quien había sido el causante de esto, oh claro que ella sabía quién fue, reconocería la firma de energía en cualquier lugar, esto fue obra de su hermano menor Zeus.

Decir que estaba furiosa era decir poco, durante siglo aguanto todas las estupideces de su familia y sacrifico muchas cosas con la creencia de que los olímpicos cambiarían y al fin serian una familia.

Le cedió el trono a su hermano menor, si bien era cierto que no tenía un interés como tal en ser la reina, no quitaba el hecho de que lo cedió porque sabía lo que sucedería si Zeus no lo obtenía. Desde que lo conoció por primera vez a diferencia de sus demás hermanos a excepción de hades, se dieron cuenta de la avaricia y deseos de poseer el trono que tenía Zeus y ella en su ingenuidad decidido cederlo aun cuando su hermano hades le aconsejo que no lo hiciera, al final no lo escucho y se lo dio para que no hubiera una guerra civil, ese fue el primer punto de quiebre.

Con el tiempo se dio cuenta que fue un error, no solo era peor rey que su padre, sino que intento engañarla para que se casara con el pero como no pudo intento violarla, eso acabo con Zeus muy herido que si no fuera por su madre el estaría muerto. Al final su madre después de una charla la convenció de perdonarlo, pero eso no evito que Zeus le tuviera miedo a su poder y aun posible hijo de parte de ella, lo que lleva a su segundo arrepentimiento.

Después de otra disputa familiar y que ella otra vez en su sueño de que en algún momento fueran una familia y para calmar las tornas hizo el pacto de que sería una diosa virgen solo para calmar las paranoias de Zeus y su familia tuviera, aunque sea un momento de paz, aunque eso fuera sacrificar su mayor sueño de ser madre ( No ayudaba que después de eso su madre no dejara de molestarla con que consiguiera pareja para así tener un nieto de ella), ese fue el segundo punto de quiebre.

Durante años todo siguió el mismo ciclo, su familia peleando por alguna estupidez ocasionada por Zeus y ella intentando arreglar cada problema que ocasionaban ya sea entre ellos o con algún otro panteón debido a Zeus que siempre intentaba violar ya sea alguna diosa o humana de esos lugares. Ella ya no sabía cuántas veces había evitado que su panteón fuera a la guerra y sea destruido por otro.

Cuando hablaba con su madre para que la ayudara a solucionar el problema con Zeus o alguno de sus otros hermanos ella solo le decía que los entendiera y los perdonara, que algún día ellos entenderían y cambiarían para mejor, con el tiempo entendió que su madre, así como no tuvo la fuerza de voluntad para evitar que fueran tragados por su padre, tampoco la ayudaría para cambiar a su familia debido a su debilidad por Zeus que fue el único al que pudo "criar" de todos sus hijos.

Con el tiempo se fue alejando poco a poco de su familia, sus ojos ya no mostraban el mismo cariño y amor por su familia (claro esto lo ocultaba bajo una ilusión para que su familia no se diera cuenta), poco a poco estaba perdiendo la esperanza hasta que conoció a una pequeña niña llamada erika. Ella era una semidiosa hija de un dios menor de su panteón, su madre la había abandonado debido a que siempre le recordaba a su progenitor y su padre como la mayoría de los olímpicos tampoco les importaba si no traían orgullo u honor a su nombre.