Soy un Goetia En DxD [CANCELADA]

Guerra Civil [3]

El territorio Cimeneris era un caos. Mientras que los militares de ambos bandos se enfrascaban en una cruel batalla. Los civiles corrían lejos del conflicto bélico que se llevaba acabo en su ciudad.

El hijo mayor de los Cimeneris quien era el general de su ejército, se hallaba luchando contra el dragón que había aparecido de un momento a otro en su hogar.

¡BOOOM!

El Cimeneris salió atravesando un edificio, haciendo un giro en el aire cayó de pie en la calle. Viéndose que estaba sudado y lleno de polvo.

???: Tengo que avisarle a padre, ahora debe de estar en el centro de la ciudad organizando una....

Fue interrumpido abruptamente. Aquel dragón salió destruyendo el edificio por el cual el demonio había salido, lanzando un rugido el cual rompió los cristales de los edificios alarmando a los pocos civiles que quedaban en la zona.

Algunos soldados del territorio que estaban cerca atacaron al dragón para que esté no matara a los civiles. Pero fueron rápidamente eliminados por los zarpazos del dragón.

El pelinegro no aparto la mirada del dragón, el cual, lo miro después de masacrar a los soldados. Ambos se quedaban viendo, como si dos animales fueran a pelear por el dominio de un territorio. Solo que esto era entre un demonio y un dragón.

???: Tsk...Supongo que no tengo opción - dijo serio.

Un aura oscura empezó a rodear al pelinegro, a la vez que un par de cuernos sobresalían den su cabeza y dejaban ver cómo el chico solo tenían un brazo, pero esto cambio ya que le empezó a crecer un brazo a base de pura magia.

???: Yo soy Cádiz Cimeneris. Prepárate bestia - dijo serio, mientras varias esferas oscuras lo rodeaban.

Mientras eso pasaba. Lejos de ahí se podía ver a Valeria junto a aquel enmascarado correr en dirección desconocida. La mujer podía ver cómo su territorio se volvía un campo de batalla.

Valeria: Esto no tiene sentido, hace unos minutos todo estaba bien - dijo sin poder crecer lo que sucedía.

¿Eh?

Inesperadamente, la chica fue lanzada al aire al mismo tiempo que extendía sus alas. A la par, el enmascarado era golpeado y mandando hacia el interior de una tienda.

Valeria vio sería al responsable del ataque furtivo, siendo este un hombre alto y de cabello negro.

Caín: Buenos reflejos - dijo tranquilo, mirando a la demonio.

Valeria: ¿Quién eres?

Caín: Soy Caín. No me interesa saber el nombre de demonios

Valeria: Tranquilo, no era mi intención de darte mi nombre - dos portales oscuros se crearon a sus costados e inmediatamente, varias calaveras en llamas salieron disparadas en dirección de Caín.