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Había una vez un príncipe que heredó ser la cabeza de familia después de que su hermano mayor fuera exiliado de la misma, desde ese momento toda la presión de su padre recae sobre sus hombros y como tal debe cumplir las expectativas planteadas

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Había una vez un príncipe que heredó ser la cabeza de familia después de que su hermano mayor fuera exiliado de la misma, desde ese momento toda la presión de su padre recae sobre sus hombros y como tal debe cumplir las expectativas planteadas.

Su padre lo manda a llamar con mucha insistencia, contempla que su madre también se encuentra en el despacho de su padre. Saluda a ambos dando una reverencia.

—Sasuke, puedes sentarte.

Mira al asiento que está en frente del escritorio de su padre y procede a sentarse, nota como su padre no quita su mirada de él. Siente un mal augurio por alguna razón, hasta ese momento, parecía un día bastante normal incluso podía decir que era un buen día, demasiado bueno para ser verdad.

Su padre no le da vueltas el asunto y dice lo que se ha estado guardando por el momento.

—Sasuke ha llegado el momento de buscarte esposa.

La noticia le cae como balde de agua fría, un matrimonio arreglado era lo último que quería escuchar de la boca de su padre. Se habia quebrado el lomo siendo el hijo perfecto después del desliz de su hermano y ahora parece que ha sido en vano, pues está en el mismo punto donde su hermano; Itachi empezó a decaer como el hijo perfecto, en el momento en que sus padres le arreglaron un compromiso.

—¿Casarme? ¿No es demasiado pronto? —intenta distraer sus verdaderas intenciones.

—Es un compromiso que debe marcarse desde ahora, debemos asegurar que puedas casarte con esta chica.

—¿Ya la eligieron?

Pregunta intentando no sonar angustiado, pero la forma en que su padre frunce el ceño le indica que no lo logra del todo.

—Por supuesto, si no. No te hubiera dicho nada.

Ahí estaba otra vez ese sentimiento de ser el títere de su padre. Tiene que pensar mejor en lo que va a decir, ha tenido que tratar con pinzas a su padre, desde que el chico becado lo había superado en ser el primero de la clase.

—¿De quién se trata? —no le podría importar menos, con quien sus padres quieren que se case.

—Es la hija del señor Hisashi Hyuuga.

"La princesita" son las primeras palabras que se le vienen a la cabeza, intenta mantener una expresión serena, para que su padre no se moleste.

—Es una muchacha educada y refinada, además a aceptado ingresarla en Konoha para que pueda pulir sus habilidades con el piano y el violín.

Sasuke jamás había conocido personalmente a la chica, pero sabía a la perfección lo caprichosa que podría llegar a ser esa chica, incluso mantenía una doble cara, en frente de los mayores era la chica impecable que todos sueñas tener como hija y con la gente de su propia edad o bien los ignora y pasa de ellos o los manda a volar. Que frustrante que encima de arreglarle un compromiso, sea con una de las chicas más complicadas.

La Princesita | Naruhina |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora