5. ¿Te gusta?

1.5K 144 10
                                    

Rebecca Armstrong

-Hola...

-¡Por fin! Me tenías demasiada asustada.

-Lo siento por eso.

-¿Cómo estás? ¿Dónde estás? Dios estoy demasiada preocupada.

-Estoy bien, me estoy quedando con una amiga, dormiré aquí... -la voz de mi hermana se escuchaba muy alterada.

-¿No es con Jane? ¿En qué estabas pensando? Deberías estar ya en casa.-mi hermana me regaño por la llamada.

-Es alguien de confianza, de hecho ella me obligó a llamarte. La conozco de hace poco pero es muy importante para mi.

-¿No lo ibas hacer por ti misma? Para qué preguntó eso era obvio. -me reí un poco ella misma se había contestado.

-Lo siento por preocuparte.

-Pensé qué te había pasado algo... sé qué te enojaste conmigo, pero por favor no lo vuelvas hacer, aunque sea contestame.

-Se qué necesitamos hablar, pero en éste momento no estoy preparada.

-Rebecca... te conozco se qué eres impulsiva y muy terca, no tiene sentido pelear.

-Si me conoces, sabes que voy a estar bien.

-¿Dónde te vas a quedar?

-Me voy a quedar a dormir con ella.

-Solo dime cómo se llama está chica, no estaré tranquila, no la conozco.

-Se llama Freen, algún día te la presentaré es alguien muy buena, de confianza, me hizo llamarte a tí y también a Jane, le preocupo y también me dió de comer.

-¿Eres una niña pequeña para qué te hagan de comer?

-El caso es qué ella me cuida, ten por seguro estoy en buenas manos.

-Confio en eso Rebecca, por cómo hablas de ella, se qué es una gran muchacha. Es la primera vez qué te escuchó hablar con tanto cariño de alguien qué apenas conoces.

-Supongo qué ella es especial...

-¿Especial? Solo por favor vuelve mañana a la casa, y contéstame cuándo te hablé.

-Bien, eso haré.

.
.
.

Freen Chankimha

-¿Todo bien?

-Si, solo me dijo qué ya mañana vuelva a casa.

-Yo te hubiera regañado.

-Qué mala... Sinceramente ella entiende porqué no quiero volver a casa, y está bien, me da tiempo para relajarme y pensar.

-¿Qué sucedió? Bueno si puedo saber.

-Problemas familiares, creo qué lo había mencionado antes...

-Mencionaste qué peleaste con tú hermana..

-Si... no soy tan buena contando mis cosas, mejor hablemos de otra cosa. -agacho la cabeza, y habló con timidez.

¿Por qué tengo tantas ganas de abrazarla?

-Bien, con lo qué estés más cómoda para mi está bien.

-Gracias...

-¿Quieres subir a mi habitación?

-¿Eso es una propuesta?

-Idiota... ¿Eres mujer qué puedes hacerme?

-¿Quieres qué te enseñé? -se acercó y yo me levanté rápidamente.

La Melodía De Tu Corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora