Under the neon lights [Yoontae]

capitulo uno

El hombre miro a Taehyung un poco incrédulo. — ¿Te gusta el boxeo?.— investigó curioso.

Taehyung negó. — Pero quiero aprender a defenderme.— hablo con sencillez.

— ¿Acaso te molestan en la secundaria?.

— Soy universitario, señor. — aclaró con voz ronca.

El hombre sonrió apenado. — lo siento, es que aparentas tener 17 años.— se disculpo. — Entonces, ¿Por qué?.

— ¿Si le soy sincero, me dejara inscribirme aquí?.— preguntó. El hombre asintió, realmente tenía curiosidad. — La verdad es que después de mi turno de trabajo, un hombre intentó propasarse conmigo. — explico, con el entrecejo fruncido.— no pude hacer más que dar una patada a sus bolas y salir corriendo. Por eso quisiera aprender, solo para defenderme cuando sea necesario.

Cuando Taehyung alzo su mirada, el hombre frente a él tenía la mandíbula apretada, parecía molesto.

— Debiste agarrar una botella y partirsela en la cara. — dijo con voz ronca. — Debió ser difícil, ¿No?. — pregunto, recibiendo un "Si" en un  murmullo. — Bien chico, vayamos a la oficina, por cuestión de seguridad tomaré tus datos básicos, y si quieres yo puedo enseñarte. Pero serían unos cuantos días a la semana, ¿Te parece?.

— Eso sería grandioso, gracias señor...

—  Namjoon, Kim Namjoon. — extendió su mano. — ¿Y, tú eres..?.

— Kim Taehyung, es un placer. — correspondió al saludo, y después hizo una pequeña reverencia.

— Lo pensé pero, ¿Eres nuevo aquí, no es así?.

— No precisamente, es decir, tengo un año aquí. Me mudé de Corea por la universidad. — explico.

— Si, eso explica tu manera de hablar. — sonrió sincero, haciendo que se formaran los hoyuelos en sus mejillas. — Taehyung, hablame de manera cómoda.

  Esa tarde Taehyung se inscribió en el gimnasio, tuvo que idear un horario para equilibrar las horas de universidad, los días del club y ahora, los días de entrenamientos con Namjoon.

Una semana después, sentía cada músculo doler como el infierno, gracias a las coreografías que tenía que aprenderse para los shows , tenía cierta resistencia, pero nunca imaginó que entrenar dando unos cuantos golpes a un saco seria tan agotador, pero gracias a la motivación de su exigente entrenador, Taehyung no se rindió ante el dolor muscular.

• • •

— Parece que te arrolló un autobús.— bromeó Seokjin al ver a su amigo entrar a la sala, sudoroso y jadeando. — Debiste darte una ducha por lo menos.

— Hay un problema con las duchas, lo arreglarán en unos días, así que no tengo opción mas que volver así. — explico para después dejarse caer en el sofá. — Estoy casando... Y Namjoon es un monstruo. — se quejo.

—  ¿Namjoon?.— pregunto curioso.

— El hombre que me enseña. — respondió sin mirarlo. — te hablé de él hace dos días, ¿Lo olvidaste?.

— Perdón, no recordaba su nombre. — Seokjin se acercó a Taehyung. — ve a darte una ducha, hoy tienes que ir al club.

Taehyung se levantó con pereza, se encamino hacia el baño para darse un aseo profundo, luego de unos minutos, Taehyung estaba listo para irse en compañía de su amigo.