"Desde la primera vez que te ví, no pude sacarte de mi cabeza."
¡Aclaraciones!
- Ésto es sólo una adaptación a Lawlu, la historia original le pertenece a @NewCastlevania.
- Los personajes le pertenecen a Oda.
- El fanart de la portada tampoco es mí...
La clase había terminado. Ambos se sentaron en las gradas para calzarse.
"¿Necesita que le lleve? Hoy puedo hacerlo yo mismo."
"No es necesario, vine en coche pero gracias."
"Lo acompaño, yo también he traído el coche."
Law se puso de pie y se quitó la parte de arriba del traje dejando a la vista su torso desnudo. Luffy apartó la vista rápidamente con la cara más caliente que un plato de sopa recién hecho. Law lo notó.
"No se asuste de mí, no tengo nada que usted no tenga" dijo riéndose.
"Ah... ya, es solo que me pilló desprevenido, y... no quería incomodar..."
"Pues yo creo que usted es el que está incómodo. ¿Nunca se ha cambiado delante de otros hombres?" preguntó mientras subía la cremallera de una sudadera azul oscuro que se había puesto sin poner nada debajo.
"Claro que sí, solía ir al gimnasio y a la piscina pero no sé... supongo que me entro vergüenza" respondió el rubio rascándose la nariz.
"Después de haberse pasado una hora tirandome al suelo ya no debería de sentir vergüenza."
Law hablaba con Luffy con total tranquilidad. Como si se conociera de toda la vida, salvo que algunas veces se referían de usted.
El sensei lo acompaño en el ascensor, donde volvió a sacar el libro y a leerlo. Luffy aprovecho para echarle miradas furtivas.
Era demasiado guapo cómo para dejar de mirarlo.
Al pasar por la recepción Kid paró a Law para darle unos papeles y recodarles la hora de unas reuniones.
"Me tengo que ir."
"¡Law! Esta es una reunión importante y tienes que tenerlo rellenos para el viernes. No te vayas a olvidar."
"Que si que si" se giró hacia Luffy "vámonos"
Los dos se pusieron en camino al coche del joven morenito.
"Parece que es un hombre ocupado, Torao."
"No, solo que él se preocupa demasiado."
Cinco minutos fue lo que tardaron el llegar a ver el coche del más joven.
"Ese es mi coche, muchas gracias por acompañarme."
"No es nada, tiene un coche bonito, yo tenia uno parecido hasta que mis socios me regalaron uno nuevo."
"Tienes buenos socios."
"A mi me gustaba mi antiguo coche, pero ellos no lo soportaban, les daba veguneza venir conmigo a los sitos."
"Vaya..."
"Bueno, nos vemos la semana que viene."
"Si, a la misma hora."
Luffy entró en su coche y cuando se giró a ver si el otro seguía allí, el hombre se dio la vuelta y se fue. Su coche estaba algo más cerca que el maestro.
Cuando llegó a su casa volvió a darse una ducha. El poder tocar a Law, sentir su cuerpo cerca, que le rodeara con sus brazos, que tocase sus manos y que al final de todo se quedase semidesnudo delante de él con total tranquilidad. Su cuerpo era mucho mejor de lo que se había imaginando.
Después de cenar y meterse en la cama los pensamientos continuaron. Law ocupaba su mente al cien por cien.
Su cerebro y mente cayeron en su sueño mientras en ellos seguía Law.
Pasó un jueves tranquilo y llego el viernes. Luffy leía el periódico en su mesa de clase mientras llegaban sus alumnos. Cuando se disponía a pesar las paginas vio una mirada picara en su alumna.
"¿Que pasa Daisy?"
"Nada" dijo sonriendo.
"¿Por que me miras así?"
"Por nada" respondió de la misma forma.
"Dime que quieres."
"Nada, nada."
"No creo que sea "nada". Dímelo."
"Me ha dicho un pajarito que..."
"¿Qué cosa?"
"Te habías apuntado a mis clases."
"Si, bueno..."
"¿Cuando podrás venir con nosotros?"
"No lo sé."
"Law sensei dijo que eras bueno."
"Es que soy fuerte."
"Es un poco tarde para que te pongas a hacer artes marciales, los jóvenes avanzamos rápido."
"Nunca es tarde para aprender algo nuevo" Luffy no apartaba la vista del periodo mientras hablaba con ella.
"Ya pero tu estas viejo, en vez de ponerte a hacer eso deberías de buscar una novia."
"Si estoy metido en esto es por tu culpa."
"Si pero para reírme de ti."
"Pues te ha salido el tiro por la culata."
"¡No es justo! Tiene al sensei todo para ti solito, así cualquiera avanza."
"Solo voy un día por semana."
"Un día eh..."
"¿No te lo dijo tu sensei?"
"El sensei no dice nada, solo dice que no es de nuestra incumbencia."
"Pues lleva toda la razón."
"No es justo, insistí para que te apuntaras y ahora te has hecho amigo del sensei."
"Siéntate ya."
Daisy volvió a su asiento, el profesor guardó su periódico y escondió una sonrisa.
"amigo"
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Se me había ido la luz, lol
Me tardaré un poco más ya que echaré un vistazo rápido a los errores de la adaptación, tanto en ésta como en Falofilia y Ahegao
