Destino [Las Joyas de la princesa]

Destino

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Bavilo se quedo completamente callado cuando un jarra llena de jugo rojo le fue tirado encima por Ariana, quien luce desquiciada, ve a las damas de compañía sumamente asustadas y incluso con heridas, recuerda como esas dos se burlaban de él cuando su hermana hacia lo mismo en el pasado, ¿Qué les dejo de divertir? ¿Ariana se desquita con ellas? eso pasaría tarde o temprano, no le sorprende, tampoco la cachetada que recibe y luego ser empujado, ve los ojos de Ariana oscurecidos mientras lo agarra del cuello de su camisa.

—Maldito hijo de perra, al final eres una zorra como tu madre—la ve levantar su mano.

Una nueva cachetada le es proporcionada, seguido de varios rasguños y tirones de cabello, los guardias reales no hacen nada, no quieren tocar a la hija favorita del Emperador, aunque les pesa no poder ayudar al príncipe, saben que pueden ser decapitados si Ariana así lo desea.

¿Cómo llego a esto?

Su mirada se vuelve borrosa, su cabeza se siente pesada y mareada, siente como la sangre escurre por su cuerpo.

La cabaña junto al río.

Su cuerpo se debilita.

El sonido de la naturaleza.

Escucha gritos, pero no los entiende.

Pescando junto a sus hermanos mientras ríen.

¿No es ese un buen futuro?

Se despertó con su cuerpo adolorido, ve al medico sentado a su lado, un señor de edad avanzada que lo ha atendido desde que es un niño, esté no tarda en revisarlo, al estar tan acostumbrado no necesita de las indicaciones, escucha el diagnostico atentamente, múltiples heridas y una contusión en la cabeza, perdió el conocimiento.

—Cachorro—el medico lo mira—, tu calor será pronto, no deberías pasar por esto.

—Lo lamento.

—Se que no es tu culpa, se lo decía a Dios, espero que escuche mis plegarias y sea la última vez que tenga que tratarte, no quiero que volver a verte así.