Día esperado con algo inesperado
Todas las tarde de los fines de semana iban a ver el paisaje que tenía de vista ese banco donde ella estaba sentada. Ya era como una costumbre para ellos. No pasaba mucha gente por esa parte pero aún así, a ellos les parecía un lugar especial.
Mientras ella se distraía con lo que ven sus ojos delante, un paisaje lleno de verde y el cielo mezclado de tonos celeste, azule y gris por que la noche no tardaría en llegar. Pasaron los minutos. La gente se dirigía a sus casas mientras que ella le siguió esperando. Leah no dejaba de revisar la hora en la pantalla de su teléfono a cada rato, o mirando las notificaciones que recibía esperando que una de fuera de él. Pero se decepciona cada vez porque ninguna es de Owen.
—Joder....—murmuró.
Miles de pensamientos cruzaban su mente;
Quizás no podía, o a lo mejor le surgió algo. Puede que se retrasó. Pero ¿ninguna notificación?
Leah decidió que sería buena idea hacerla una llamada para asegurarse. Marcó su nombre y presionó el símbolo de llamar. Se lo llevó a la oreja y acto seguido empiezaron los tonos de llamada, uno... dos...
¿No respondería?
Tres. El contestador. Ella frunció el ceño y volvió a intentarlo.
Uno....
Dos...
Tres. Contestador.
Ella aún así no se dio por vencida y siguió esperándole ahí sentada, ya con la desilusión en sus ojos. Mirando cansada a cada persona que pasaba por su lado aunque no era tantas las que pasaban.
La pantalla de su teléfono ya marcaba las once de la noche. Estuvo esperándole tres horas. La fría noche la recibió, pero ella aún seguía queriéndole esperar ahí mismo. Sabía que en su casa no estaba porque él le había dicho que después de clase iría a preparar unas cosas, y que por nada en el mundo fuera a su casa, no habría nadie.
Su estado de ánimo ya empezó a bajarle cada vez más y ahora aguantaba sus lágrimas en sus ojos, con la pequeña esperanza de que viniera como le prometió. Tenía tantas ganas de que llegase este día y todo se había torcido. Era de noche, el frio aire revolvía su cabello rojizo, la soledad era su única compañía y para rematar, el no iba a pedirle oficialmente que fuera su novia.
Con el corazón en la garganta, y las lágrimas en sus ojos todavía, marco el contacto de su mejor amiga y se lo llevo a la oreja.
No tardo en contestar.
—Hola, Hola.
—Me ha dejado plantada.—dijo en un hilo de voz al tan solo descolgar.
—¿qué?
—No ha venido, Trina. Owen me ha dejado plantada, y ni siquiera responde mis llamadas.
—Ahora mismo voy.—dijo rápidamente.
Sabía que era algo raro de irte de Owen.
—Está bien.
Finalizaron la llamada y el Leah recibió una notificación de Owen.
" Lo siento mucho por esto Leah. No era mi intención dejarte ahí así, pero no puedo seguir con esto. Desde hace un tiempo que ya no siento lo mismo por ti. Quiero terminar con esto ya porque no quiero seguir mintiéndote. Perdóname por esto, no me busques, no me llames. Cuídate bruce. "
¿Has escuchado eso? Era su corazón romperse.
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Cierra los ojos y escúchame
Short Story¿Que habrá cambiado en él? Dos enamorados juraban, o...¿alguien de los dos mentía? Ese mensaje puso la vida de Leah patas arriba, le dejó un vacío y un corazón hundido. Pero aún así ella no se da por vencida y sigue con su idea en la cabeza. Nadie...