Los Ojos de Xóchitl (Parte 1)

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11/01/13

Hola. Mi nombre es Luis Enrique García Saavedra. Y no sé por qué estoy poniendo mi nombre completo, siendo que nadie debería ser capaz de leer esto. Si alguien de mi salón llega a encontrar este cuaderno, va a valer verga. No me van a bajar de puto. Apenas tiene como 4 meses que conozco a mis compañeros pero ya sé que se pueden agarrar de cualquier cosa para ser culeros. Nada los va a detener. Justamente por eso empecé a hacer este diario, para poder decir lo que no puedo decir en la escuela. Y realmente tendría que agradecerle a la maestra de orientación; porque fue ella la que nos comentó un día que lo que podíamos hacer para expresar lo que sentíamos, era escribir. Vaya que tenía razón.

Y es que lo quiero decir es algo que creo que nadamás yo me he enterado. Bueno más bien me he dado cuenta de algo que tiene una de mis compañeras. En mi salón va una chava que se llama Xóchitl. Es una chava flaquita, es como de mi estatura más o menos, su piel no es ni güera ni morena; está como mezcladita. Su cabello pareciera que es negro, pero no, en realidad es de un color morado muy oscuro. Solo se nota si le pones atención. Siempre se peina con un fleco y con dos tipo coletas pero que tienen forma de chongo. Tiene la nariz finita finita y cada que sonríe se le hace un hoyuelo en el cachete. Pero ese no es el tema. El tema es que tiene algo muy raro en sus ojos. De repente un día, quien sabe cómo o por qué, me puse a ver sus ojos y así de huevos, de huevos, en sus ojos se podía ver el universo. No es mamada, neta que puedes ver el universo, así como si trajera dos ventanitas en su cara. Si le ves las pupilas puedes ver las estrellas y... y... y pus todo eso que hay en el espacio. Está cabrón la verdad. ¿Qué pedo con eso no? ¿Qué le dan de comer en su casa? Juro que no es un alucín mío. Jamás he probado las drogas. Y hubo un día que la estaba viendo otra vez pus para intentar entender por qué pasa eso, pero se dio cuenta que la estaba viendo a los ojos y me dice: -¿𝘘𝘶𝘦́ 𝘱𝘢𝘴𝘰́? Así con una sonrisa medio burlona, y le dije: -¿𝘘𝘶𝘦́ 𝘱𝘢𝘴𝘰́ 𝘥𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘰 𝘲𝘶𝘦́? Si no mames, osea, ahuevo yo me iba a hacer pendejo para que no supiera que yo sé de este pedo. Porque tampoco es como que pueda llegar y decirle: -𝘖𝘺𝘦 𝘟𝘰́𝘤𝘩𝘪𝘵𝘭, ¿𝘲𝘶𝘦́ 𝘱𝘦𝘥𝘰 𝘤𝘰𝘯 𝘵𝘶𝘴 𝘰𝘫𝘰𝘴? Obviamente que no. Aunque también quisiera saber si ella lo puede ver cuando se ve al espejo.

Aunque tengo que admitir que Xóchitl es una chava bien buena onda. Una vez así bien de la nada me puse a platicar con ella de música. Pero me decepcionó un poco saber que le gusta el pop. Yo soy rockero forever carnal. Yo puro Led Zeppelin, Black Sabbath, Jimi Hendrix, Pink Floyd, The Who, Deep Purple, Mötley Crüe, Guns N' Roses. Ya si nos vamos a bandas más nuevas pus Tame Impala y Wolfmother no? Tonces cuando me dijo que le mama Katy Perry, Lady Gaga y Justin Bieber, le pregunté: -¿𝘕𝘰 𝘵𝘦 𝘭𝘢𝘵𝘦 𝘢𝘭𝘨𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘦𝘯𝘨𝘢 𝘨𝘶𝘪𝘵𝘢𝘳𝘳𝘢𝘴? Y ya me contestó que los Ting Tings. Ni puta idea de quien sean esos weyes. Pero... a pesar de que no coincidimos en gustos de música, me gustó mucho platicar con ella, así aunque fuera nadamás un ratito.

No sé, a veces me gustaría hacer cosas que no suelo hacer. Por ejemplo, desde que vi Proyecto X me gustaría ir a fiestas, pero luego me pongo a pensar en que yo no soy así y que si lo empiezo a hacer, los demás se van a sacar de onda. ¿Pero realmente lo vale? ¿Debo hacer lo que yo quiero o lo que los demás quieren que yo haga? Está cabrón. No es una decisión tan sencilla. Y es que luego hay veces en las que si me da el arrepentimiento por no hacer cosas que, digo yo, hubieran estado chidas. Como justamente pasó hace unos meses. Hubo un día que tuvimos hora libre, y entonces mis compañeros lo que hicieron, fue que de huevos se pusieron a bailar esta rola que se puso de moda; el ganam style una madre así se llama. Hasta Xóchitl se puso a bailarla; y pude haber bailado con ella, ah pero don mamón no quiso dejar de tener su pinche actitud de rockerito y se quedó en su banca nomás viendo a los demás como pendejo. Pinches mamadas.

Es un pedo. Es un desmadre. No es posible que me esté arrepintiendo tan rápido de este tipo de cosas. Aunque no sé, igual y son mis ganas de querer salir de mi zona de confort. Sea como sea, lo importante aquí es no cagarla de ninguna manera en ningún momento. Aquí nadie olvida. No es conveniente tener un apodo desde el primer año. Me gustaría pasar más tiempo con Xóchitl, eso es un hecho, pero no sé... tengo que ver de qué forma le puedo hablar más. No es un mal momento a decir verdad, apenas regresamos de vacaciones. El pedo es que no le hablo a ninguno de sus amigos, y la única fiesta a la que podría ir sería su cumpleaños, si me invita verdad. Me gustaría ir a sus 15 años pero todavía falta un ratote. Está cabrón. Yo creo que chance y un día de estos le pregunto sobre sus ojos, a ver que sale.

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