Idea 1: Cinco de Mayo.

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Historia: Hoy es el cumpleaños de Luffy y mientras veia Tik Tok se me ocurrio escribir esto, perdon por no dejarles el link, lo perdí.

Cabe decir que es cortito y lo escribi en menos de 10 minutos mientras descansaba de barrer la casa.




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El típico cántico de cumpleaños rodeó el comedor, el pastel era increíble, digno de ser algo hecho por Sanji y con una vela muy bonita alumbrando la habitación.

Wow, veinte años.

A esa edad había muerto Ace.

Él no se sentía tan maduro como Ace, sentía que aún faltaba mucho, era fuerte, quería creer que lo suficiente para proteger a los que quiere, tiene muchas cosas que a veces pasan por su cabeza mientras mira el mar en las tardes desde su asiento favorito, extraña a Sabo y su casa en las noches donde por razones misteriosas no duerme, no se sentía para nada realizado para la edad que tenía y eso tuvo que haber pasado en la cabeza de Ace.

El murió cuando apenas había comprendido que era querido y que podía vivir libremente.

Aun podía sentir como sus manos se volvían viscosas al estar con la sangre del mayor en ellas, recordaba los sonidos de cañones y gritos a su alrededor, su cabeza tenía cada uno de esos momentos con nitidez en su cabeza.

—Desde hoy somos hermanos.

Es verdad, eso había sido cerca de su cumpleaños.

¿Cómo celebró sus cumpleaños? Aun recordaba como Dadan a veces le daba algo de ropa o le reparaba su sombrero diciendo de manera brusca que le deseaba un buen dia, Makino hacía algo de comida y luego sus hermanos le daban alguna cosa útil que encontraban en Terminal Gray.

Aunque a veces prefería solo ir a cazar y tener un gran festín de carne.

Esos recuerdos se quemaban cada vez que en un nuevo año veía la vela en su pastel y recordaba la vivre card de Ace.

—¡Luffy!

El sonido de pequeños confetis le hizo saltar del susto.

No eran cañones ni pistolas.

Sus nakamas, está con ellos.

—¡Perdón! Solo pensaba en un deseo. —se rasco la cabeza torpemente mientras acomodaba un poco su sombrero mientras intentaba calmarse sin que se notara.

Algunas miradas muy discretas pasaron entre algunos de sus nakamas.

—Es momento de soplar. —recordó Nami quien le habló con cariño.

No permitiremos que te vuelva a pasar nada, capitán.

Y así, Luffy cumplió veinte años.

La edad perfecta para un rey.

Delirios de una escritora fan de One Piece.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora