— Solo entra al jardín, anda.— El joven de cabellos negros que llegaban hasta casi tocar el suelo cruzó sus brazos, recargandose en la puerta de marco y decoraciones doradas que conducía a un jardín de flores con gente disfrutando de su grata estadía, flores de colores claros que adornaban el pasto.— No, no estoy listo para morir, hay muchas cosas que quiero hacer, quiero vivir y contar, que la gente recuerda quien soy— Juntó las palmas de sus manos en plegaria para que aquella deidad fuera piadosa, sin embargo, raíces de árboles y plantas empezaban a salir de la puerta dorada en su dirección para jalarle dentro.
— ¡ENTRA AL JARDÍN! — Aquel dios salió de la forma humanoide que había adquirido y se deformó a una neblina que rodeó el cuerpo de (name) para empujarle a la puerta que llevaba al jardín que había vuelto el cielo rojizo y las plantas de colores oscuros y grisaseos. Las personas dentro del jardín simplemente eran sombras de ojos rojos que miraban en su dirección en posiciones estáticas— Lo estoy diciendo de forma gentil, pero no aceptas el destino que se te impuso, el hilo termina aquí.— Una mano salió de la niebla, tocando con su dedo las manos que estaban juntas en plegaria, soltando una pequeña risita con tensión ante ls situación que este pequeño y terco ser estaba dándole
¿Hilo? ¡El hilo! Siguió el hilo hssta llegar a esta situación. Miró en sus manos el carrete de hilo rojizo y miró que aún quedaba mucho, de hecho cambiaba el color a uno más claro, fué entonces cuando frunció el seño, mirando al dios con rabia, sintiendo que podía escupir serpientes venenonas en su contra.
— ¡Aún me queda vida! ¡Eres un dios mentiroso! ¡Un maldito tramposo! Manipulador, mi vida aún no acaba, solo quieres jalarme al Inframundo para ganar la apuesta— apretó el carrete con fuerza mientras veía a los ojos del dios quien la miraba con rabia al ser descubierto por el humano.
— Dije: Entra al jardín.— los gritos de las personas salieron del lugar ya abierto y los cuerpos de color obsidiana se arrastraban a la puerta, sosteniéndose del marco dorado, manchando con líquido rojizo, estirándose para tomar sus extremidades al mismo tiempo que las raices le empujaban a la escena.— Te dí la oportunidad de morir de forma tranquila, sin embargo eres terco a no morir de la forma que más piden los tuyos, calmadamente, sin dolor.
— ¡Es porque aún no soy libre, me niego a morir como esclavo!— Todo fue tan derrepente, los gritos, las manos queriendo tomarle y las raíces que le empujaban a la brillante puerta, pararon.
— JA, ¿Por qué quedarte en garras de la esclavitud cuando puedes morir ahora?— El dios volvió a su forma humanoide para soltar risas sin control ante ls respuesta —Te daré otra oportunidad ¿Te parece?— El dios estiró su mano como forma de cerrar el trato con el humano.
—Me niego, me niego rotundamente a morir como esclava, por más piadoso que sea, Dios Vine.
— ¿Estás seguro de tu veredicto?— Cruzó sus brazos y caminó denuevo con su forma humanoide al rededor del humano.— Puedes morir de formas violentas o desagradables si te niegas.
— Estoy seguro del precio que debo pagar por vivir como quiero— Suspiró con cansancio por la situación.
— Entiendo — su semblante cambio a uno más amable, calmado y reconfortante, la puerta cambió denuevo al pacífico jardín que era antes.— Es completamente válido querer vivir de forma libre, sin que alguien te diga que hacer.
— Pero usted quería que-
— Me retiro de la apuesta, sin embargo, abogo por tí si es que quieres morir de alguna forma rn especial, querido humano. Solo era una prueba. No tienes miedo de morir, estás listo para hacerlo y lo aceptas en cualquier momento siempre y cuando seas libre. Entonces, con eso en claro, morir no es tu miedo, sigue adelante hasta donde el hilo termine.
La muerte no es simplemente violencia y desdicha, la muerte es paz para aquellos que sufren, el descanso psrs los cansados, morir no es por temer, todos vamos a sus brazos, aquellos que nos reciben sin importar quienes somos, porque la muerte no distingue formas ni colores, la muerte es el final de todo.