𝓡𝓔𝓓 𝓪𝓼 𝓪 𝓡𝓞𝓢𝓔

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Otro dia de mierda mas. Solo quedan cuatro para que llegue el fin de semana. Y para que me vaya a Sevilla. Pero primero tengo que sobrevivir en el colegio. No tengo amigos. Vamos, si por amigos queréis decir personas con las que quedas entonces si. Pero gente en la que tengo confianza, gente con la que me puedo reír de todo, con la que puedo ser yo mismo, eso no lo he conocido nunca. Y probablemente nunca lo conozca. Porque soy yo, Evan, y Evan no tiene amigos. Bueno, creo que me debería de levantar ya de la cama. Flojamente, atrapó una camiseta, un pantalón y ropa interior y me dirijo hacia la ducha. El mordisco caliente del agua sobre mi piel me saca violentamente de mi sueño. Me paso rápidamente un jabón por todo el cuerpo, me aplico shampoo en el pelo, me froto los ojos con la mano y salgo. Atrapó ligeramente una toalla y me seco con frenesí. Después de un breve desayuno y de haberme lavado los dientes, atrapó de volea mi mochila y salgo de casa sin ruido. 

Me pongo los auriculares, ajusto el sonido al máximo y me dejo llevar por la música. A mi me encanta cantar. No tengo buena voz pero me encanta cantar, y la verdad es que tengo la impresión de estar mejorando así que de camino al colegio, siempre estoy cantando a plena voz. Hoy no. No sé por qué pero hoy no tengo ganas. Ando en silencio con mi música sonando como la banda sonora de la aburrida película de mi vida. Perdido en el silencio de mi mente, no me doy cuenta de que en medio de la calle por la que paso todos los días, se ha montado todo una colonia de policías, bomberos, investigadores, abogados y médicos, todo eso rodeado por largas barreras metálicas. Sin realmente ver a donde voy, me choco con una de las barreras y me caigo del lado prohibido. 

Brevemente consigo ver tres policías acompañados de un forense, examinar lo que parece ser... una gran mancha. Una gran mancha roja, como la sangre. En menos de una fracción de segundos, dos bomberos me atrapan y me echan con brutalidad fuera del área. Sin conseguir procesar ningún pensamiento, sigo avanzando normalmente hacia mi colegio, como si nada hubiera pasado. Encontrando un banco, me siento mecánicamente y examinó mi ropa. Joder... Está todo manchado de polvo y otras mierdas que había por ahí. No me da tiempo volver a casa para cambiarme. Bueno, tampoco es que quiera gustarle a cualquiera, que me importa lo que piensan de mi ropa? Me levanto y sigo avanzando hacia el colegio, pasando en bucle la imagen de esta gran mancha roja, roja como pétalos de una rosa.


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Sorryyy, he sido super lento para publicar este capitulo, ya espero que el resto venga con mas fluidez, disfrutad !

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⏰ Última actualización: May 27 ⏰

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𝐸𝓁 𝑅𝑒𝑒𝓃𝒸𝓊𝑒𝓃𝓉𝓇𝑜 2: 𝒯𝒽𝑒 𝒲𝓇𝒾𝓉𝑒𝓇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora