Holii, bienvenidos a varios shots con algunos de mis personajes favoritos de Jujutsu Kaisen, espero lo disfruten!!⋆౨ৎ˚⟡˖ ࣪
*No cuento con los derechos de los personajes*
-Justo así nena...- mi jefe gimió mientras sostenía mi cabeza debajo del escritorio -Volteame a ver cuando la chupes, adoro ver como intentas tomarlo todo- me dio una sonrisa ladeada, acariciando mi mejilla
No era la primera vez que estábamos en una situación así, ya eran meses que mi jefe y yo terminamos enredados después de las horas de trabajo, él era como un sueño, mi hombre ideal, era tan jodidamente perfecto.
Él me dominaba sin necesidad de denigrarme, pero a veces le gustaba molestarme de vez en cuando con una sonrisa coqueta.
-¿Sigues adentro NaNAmIiiIIi?- exclamó Gojo del otro lado de la puerta de la oficina
-¿Qué quieres?- gruñó Kento junto con su respuesta
-Una invitación...- rió mientras se asomó ligeramente por la puerta
-A que- respondió seco mientras se juntaba más al escritorio para que el peliblanco no se diera cuenta de lo obvio
-Es el cumpleaños de Megumi y haré una fiesta, tengo dos pases para ti mi buen amigo- escuche sus pasos hasta quedar cerca de un pequeño buró que Kento tenía en su oficina
-¿Por qué dos?- cuestionó Kento confundido mientras yo trataba de chupársela con el menor ruido posible
-Bueno...obviamente una para ti y una para tu hermosa secretaría que te está dando una mamada en estos momentos, tch tch deberían ser menos ruidos my friend, ¡ADIÓS!- salió de la habitación antes de que mi jefe pudiera responderle pero yo deje lo que estaba haciendo por la impresión
-Mierda....-susurré
-Ya lo sabe....estoy condenado de por vida- suspiro pensando en que sería objetivo de las bromas de Gojo de aquí en adelante -¿Irías conmigo?...ya sabes juntos...- me preguntó algo nervioso e inseguro
-Yo iría encantada pero...¿tu quieres que yo vaya contigo?- dije en el mismo tono que él usó
-Sabes que te quiero enserio y no por solamente placer- me dijo sincero mientras me tomaba para sentarme en el escritorio frente de él
Tomo mis muslos y los separo lentamente, que con uno de sus largos dedos bajo mis bragas sin romper el contacto visual. Este hombre me mojaba con solo un ligero toque.
-Kento...- suspire
-Quiero comerte el coño todos los días, pero no como algo casual, quiero que amanezcas en mi cama el resto de mi vida, nena- beso la parte interior de mis muslos, encaminandose a mi intimidad
-Que manera de ser romántico y caliente al mismo tiempo- reí mientras tiraba mi cabeza hacía atrás
-Se que te encanta cuando te hablo así nena- susurró entre mis piernas
-Sabes que sí- mordí mi labio mientras sentía su dedo recorrer mi intimidad para luego empezar a pasear su lengua
Sujeto mis muslos fuertemente mientras devoraba mi coño como si su vida dependiera de ello. Sabía que era una de sus actividades favoritas, me lo recordaba cada día que me veía, yo era su adicción.
Mis manos se enredaron entre sus cabellos rubios, tratando de estabilizarme de algo. Era tan jodidamente bueno en esto, era una adicción para mi igualmente.
-Kento...-gemí mientras sujetaba su cabello
-Mghm- murmuró con la cara enterrada en mi coño
-Ya voy a....- gemí
Él no respondió, ya lo sabía, por lo que no se detuvo, sumó dos dedos en mi entrada para ayudar a su lengua a que mi orgasmo llegara y vaya que así fue, quedó con la cara completamente empapada.
-Sabes tan bien- me sonrió para luego darme un beso
-Eres tan increíble- le sonreí igualmente después del beso
-Te necesito- me susurró besando mi cuello
-¿Ah sí..?- juguetee con mis uñas en su espalda
-No sabes el poder que tienes sobre mi, Gia- me dijo viéndome a los ojos
Tome su miembro y lo alinee en mi entrada, él jadeo por mi repentino movimiento pero no perdió el tiempo sujeto fuertemente mi cadera para dar una fuerte estocada.
Él gruñó y comenzó a embestirme fuerte, mientras apoyaba su frente con la mía, el ruido de nuestros cuerpos chocando resonaba por todo el lugar, tan obscenos pero no importaba, ahora éramos solamente Kento y yo.
Yo me aferraba a su espalda, encarnando mis uñas en ella. Ambos conectamos nuestras miradas para luego darnos un fogoso beso, lleno de lujuria y placer, sí, definitivamente así quería pasar el resto de mis días, junto a él.
-Vente junto a mi nena, necesito sentir como chorreas sobre mi polla- jadeo
-¡Mghm sí!- gemí fuertemente
Pocos segundos después ambos llegamos al clímax jadeando, ambos pegajosos con los fluidos del otro , con las manos entrelazadas, la ropa descolocada y ambos sudorosos.
-Entonces ¿qué piensas sobre llegar mañana a la fiesta con mis amigos para presentarte como mi mujer?- me besó mi mejilla
