Grapes -Rivari-

001

Abril caminaba directo a su salón de clases mientras se maldecía a si misma por estar haciendo el ridículo, llevaba semanas sin comer nada cuando iba a la preparatoria porque ella tenía esa extraña costumbre de comer todo con uvas, y era vergonzoso que sus compañeros la vieran con un envase lleno de uvas mientras comía una dona o un sándwich de la cafetería, decidió llevarlas ya que estaba harta de no poder comer nada hasta llegar a casa y a veces sus horarios se alargaban de más y tenía que soportar eso, se harto así que las trajo a la preparatoria, ella pensaba que se veía como una niña pequeña al llevar tal cosa aún más cuando sus compañeros no le veían gracia a las uvas, pero ella si, le encantaban las uvas, su extraña adición comenzó cuando tenía 5 años y fue cuando probó por primera vez una uva a lo cual quedó fascinada y ahora no puede comer nada si no está acompañado de un jugo de uva, una uva o mil cosas más que tuvieran que ver con uvas.

Cuando llegó al salón Samantha la miro y se acercó a ella mientras no había expresión en su rostro lo que hizo que las mejillas de Abril se enrojecieran.

-¿Que me ves?-preguntó tapándose la cara con una de sus manos libres-¡Samantha basta!-dijo en un tono de voz no tan alto.

-¿Por que traes unas uvas?-preguntó en un tono burlón mientras soltaba una pequeña risita.

-¡cállate!- dijo mientras se iba a sentar en su asiento dejando el envase de las uvas arriba de su escritorio-¿tienes la tarea de química?, anoche me quede dormida y no pude hacerla así que....- se quedo callada al notar la sonrisa divertida que Samantha tenía en su rostro- Si me sigues mirando así me voy a encargar de partirte tu madre- amenazo Abril.

-Me amas, yo lo sé-dijo Samantha tomando una silla al azar para sentarse frente a Abril quien rodó los ojos gracias al comentario que hizo Samantha.

-Yo solo quiero que me pases la tarea de química, ¿es tan difícil eso?-dijo un poco harta de que su mejor amiga casi ligue estuviera molestándola- Sam, por favor-pidió juntando sus manos mientras poniendo una cara triste a lo que Samantha asintió y tomó su libreta de química para pasarle la tarea.

Después de un buen rato platicando mientras Abril continuaba con las tareas que no había hecho llegó la profesora de la primera clase, no las notaba, ellas se sentaban hasta atrás y Rivers cansada de que Abril solo hablara de ese tal "Juan" tomó el envase y saco una uva de el para después llevarla a su boca y probarla, tal vez suene loco pero en cuanto la probó sus ojos se iluminaron de haber probado algo tan delicioso, a ver, es que ella si había probado unas uvas, pero esas malditas uvas eran las mas deliciosas que había probado en su vida.

-Wey, ¿donde las compraste?- preguntó Samantha cuando pudo tragar su uva.

-No, ni me hables, no pediste permiso y son mis uvas-dijo tratando de sonar molesta pero le daba un poco de ternura el cómo Samantha se puso después de haber probado solo una, estaba tomando una por una y las llevaba a su boca para después halagarlas y decirle a Abril cuan deliciosas estaban, así que soltó una pequeña risita.

-¡Te reíste!- dijo Samantha señalándola-¡¿donde las compraste?!- dijo riendo mientras tomaba otra de las uvas, la risa de Samantha estaba contagiando a Abril la cual ya estaba casi llorando de la risa.

-¡Samantha Rivera y Abril Garza, silencio ahora!-ambas dejaron de reír al instante y se vieron mutuamente para después soltar una risa inaudible gracias a que se habían ganado un regaño, todo por una discusión acerca de unas uvas.

La primera clase pasó, así como la segunda, la tercera y al fin llegó la hora de comer, Abril tenía tantas ganas de comer uvas y de por fin poder comer algo de la cafetería, Samantha también estaba ansiosa por comer uvas, le habían encantado desde la primera y ya llevaba 4, agradecía que Abril traía un envase bastante grande y que se las podría acabar, claro, solo si Abril la dejaba.

Estaban en la mesa de siempre, la gran mesa que estaba cerca de una de las puertas de la cafetería, ahí estaban Alana, Molly, Ama, Nuvia y Rocío, las 7 eran muy buenas amigas, lo eran.

Todas hablaban y reían entre todas menos Samantha y Abril, ellas tan solo se miraban, sonreían y carcajeaban, a veces las miraban raro ya que no murmuraban nada simplemente carcajeaban o se quedaban mirando para después tomar uvas y comerlas, así pasó la hora de la comida que se sintió bastante larga para sus amigas, pero Samantha y Abril lo notaron como si fuese una eternidad.
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💗-Hola-💗