My Kingdom In The New To Love Ru: El camino del Gobernante del Universo.

Capítulo 4: Persecución y confrontación 2.

De la nave que los iluminaba a ambos descendió un poderoso rayo de luz como los que se usan en las películas para abducir a las personas.

De la luz apareció un hombre alto de cabello gris y ojos azules con u a armadura de batalla.

"Zastin."

Dijo Lala escondida detrás de Toru mientras miraba al hombre.

"¡Princesa Lala¡ Le pido por favor reconsidere y vuelva."

Dijo Zastin cuando notó que Toru abrazaba a Lala.

"¿Es ese el humano que derrotó a mis subordinados?"

Dijo mirando seriamente a Toru.

La expresión de Toru se volvió oscura.

"Maldición. Solo es el primer día desde que llegué a este mundo y ya me pasan todas estas cosas. ¿Por qué no puedo tener un momento tranquilo en donde yo y mi prometida nos besamos de forma amorosa."

Pensó al sentir la mirada de Zastin sobre él.

Toru caminó hacia delante mientras que sus látigos negros cubrían su cuerpo.

Zastin notó la hostilidad de Toru y desenvainó su espada.

"Espera, Toru."

Dijo Lala sosteniendo su hombre antes de volverse hacia Zastin.

"Ya dije que no volveré. Ahora tengo una razón para quedarme en la Tierra."

Dijo Lala parándose junto a Toru con una mirada decidida recuperando la atención de Zastin.

"¿Y cuál sería esa razón?"

Dijo Zastin mientras miraba a Toru a su lado. Deseaba que su suposición fuera errónea.

"Toru y yo estamos prometidos. Me casaré con él, viviré en la Tierra y daré a luz a sus hijos."

Dijo tomando la mano de Toru quien respondió agarrándola firmemente mientras le sonreía.

"No esperaba la última línea pero no es como si no fuera a pasar de todos modos."

Pensó Toru emocionado por su futuro.

"¿Desde cuándo?"

Preguntó Zastin perplejo mientras su mirada alternaba entre ambos.

"Desde hace unas horas. Toru me propuso matrimonio y acepte."

Respondió Lala volviéndose hacia Zastin.

Toru quería refutar eso. Ella fue quien se le propuso. Pero decidió dejar su ego de lado. Esto no era una competencia.

"Aún así. Mi deber es llevarla a casa."

"Ya dije que no iré a casa."

"Pero..."

"Son mis últimas palabras."

Dijo Lala mirando a Zastin con disgusto.

"Puaj..."

Zastin dejó escapar un ruido en señal de queja.

Toru se sentía mal por Zastin ya que solo estaba haciendo su trabajo, pero eso no significa que fuera a estar de su lado.

Zastin se volvió hacia Toru quien parecía ser el favorito de su princesa y no pudo evitar sentir curiosidad por las cosas negras que envolvían su cuerpo.

A juzgar por como estaban tirados en el suelo sus subordinados Zastin concluyó que entre los candidatos este humano podría ser el más fuerte.

El problema reside en que el padre de la princesa aún no lo sabe.