Capítulo 36.- Amor, afecto y pasión (2 / 2 )

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>Loid, tú... ¿Harías el amor conmigo...?

> ...

Aquella pregunta tan repentina, si bien no lo perturbó, sí lo dejó sin palabras...

... En todo caso, no le hacían falta.

Tenía otras maneras de responder.

Por lo que, en lugar de decirle algo, Loid simplemente la tomó del rostro con sus manos y le propinó un tierno beso en los labios.

Y aquello le bastó a Yor para entender que su esposo le estaba correspondiendo.

Y ya entonces, una vez que rompieron el beso, ahora sí, Loid se dispuso a sacar sus llaves para abrir la puerta. Pasados unos segundos, dicha puerta sería abierta, y entonces... una vez que ambos entraron, y que la puerta se cerró de vuelta...

Ya sólo hacía falta que ambos se demostraran el inmenso amor que se tenían...

...

...

...

Ni bien entraron al departamento, no perdieron el tiempo, y se fueron rumbo a aquella habitación que se supone que tenían compartida como esposos, pero que realmente nunca usaban y que solo tenían para aparentar ante los demás que eran una pareja locamente enamorada.

Aunque vaya que en ese momento sí lo eran...

Una vez que se dieron paso por aquella puerta y que Loid encendió las luces, ahora sí... estaban preparados para comunicarse en el lenguaje del amor.

Lo primero que hicieron ambos, fue quitarse los zapatos y los calcetines y, ya estando descalzos, ambos se acercaron a la cama para sentarse juntos sobre esta, y solo entonces, fue que verdaderamente comenzó la diversión.

Sentados uno al lado del otro, ellos simplemente se abrazaron con mucho cariño y comenzaron a besarse sin compasión ni tregua. Yor no dudaba ni un segundo en introducir su lengua en la boca de Loid, y él igualmente no dudaba en corresponder la acción de su esposa y devolverte el jugueteo con su propia lengua, estando entonces ambas lenguas en medio de una lucha desenfrenada, compartiéndose mutuamente saliva.

Tras varios minutos se estar así, Yor finalmente quiso tomar el próximo paso, y separaría su boca de la de su esposo, dejando un rastro de saliva entre ellos en forma de hilo, para ahora sí, llevar sus manos hacia el inicio de la camisa de su esposo, y comenzar a levantarla poco a poco, dejando el torso de su marido al descubierto.

Una vez que le retiró la camisa por completo, Yor pudo entonces comprobar con sus propios ojos lo fornido que era el cuerpo de su marido, y eso solo hizo que ella se excitara y se enamorada aún más. Se moría de ganas por probarlo, y...

Así lo hizo.

Llevó su boca hacia el pecho de su marido, y, lentamente y con cuidado, comenzó a lamerle y a llenarle de saliva todo el contorno del pecho, para, posteriormente, llevar su boca hacia sus pezones, y empezar a chuparlos con muchísimas ganas. Todo esto mientras Loid hacía unos claros gestos de goce y satisfacción.

Estuvo intercambiando entre un pezón y otro de su marido por casi tres minutos, hasta que finalmente sintió que quería algo más, por lo que, dejando libre el pecho de su marido, ella se pondría de pie y se bajaría lentamente de la cama, y se pondría delante de su marido, quedando a la altura de sus piernas.

Y Loid ya se podía dar una idea de lo que ella estaba por hacer...

Ya estando ahí, Yor entonces estiraría sus manos y las llevaría hasta donde se encontraba el cinturón en el pantalón de su marido.

SPY X FAMILY - AMOR, AFECTO Y PASIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora