Harry Potter y el Hombre de Hierro 2

Capítulo 6

Tony estaba tramando algo.

No tenía nada que ver con el loco del Gran Premio, porque el ingeniero le había contado todo al respecto, incluida la proximidad actual del hombre en HammerTech. Tampoco era nada relacionado con el reactor, porque Harry estaba bastante seguro de que el único que le prestaba más atención al reactor que él era JARVIS, y JARVIS confiaba en él lo suficiente como para compartir cosas que afectaban la salud de Tony.

Así que Harry decidió aceptarlo, confiando en que Tony revelaría su mano tarde o temprano. Y dada la forma en que el hombre jugueteaba constantemente, era probable que fuera antes.

"Quieres que elija un coche para dar una vuelta". repitió Harry con escepticismo, mirando alrededor de la habitación hacia los autos ensamblados. Harry ya sabía que iba a elegir al Saleen, pero no necesitaba que Tony lo supiera todavía. "¿A dónde vamos?"

Eran poco más de las cinco de la tarde, ya sea demasiado temprano o demasiado tarde para la mayoría de los lugares a los que a Tony le gustaría ir.

Tony, cauteloso y sin molestarse en intentar ocultarlo, respondió tan comprensivamente como Harry pensó que lo haría. "Sorpresa. Porque podemos. Porque quiero dar una vuelta. Elige tu opción. ¿Por favor elige un auto?

Harry lo dejó cocerse por medio momento más antes de ceder y señalar al Saleen. "Aquél. ¿Adónde vamos, Tony?

Harry observó divertido cómo Tony abría la boca para responder automáticamente antes de que sus dientes se cerraran con un clic. El ceño fruncido que recibió valió la pena.

"Buen intento. Sube las escaleras y ponte la ropa que está sobre la cama. Cinco minutos." Las manos de Tony no se quedaban quietas, aleteando y empujando suavemente a Harry para que siguiera adelante.

Que curioso.

"Cinco minutos." Harry estuvo de acuerdo. "Dormitorio principal, JARVIS". Agregó Harry antes de desaparecer sin hacer ruido para reaparecer junto a la cama.

Los pantalones formales eran un par gris oscuro hecho a medida que siempre atraía la mirada de Tony hacia abajo, combinados con una camisa verde esmeralda que parecía ser del mismo color que el vestido que Harry había transfigurado cuando era Helena. Harry se preparó económicamente, automáticamente tratando de controlar su cabello pero desistiendo a los pocos segundos.

"¿Puedo volver ahora, JARVIS?" -Preguntó, recorriendo el dormitorio con la mirada en busca de algo que se hubiera perdido.

" Creo que sería prudente, Hadrian. El señor parece particularmente nervioso. "

Harry, ahora bastante seguro de lo que Tony había planeado, apareció de nuevo al lado del hombre. Estaba vestido con su propia ropa bonita y se veía bien a pesar de la única franja de grasa cerca de su sien. Harry decidió dejarlo – era muy Tony.

El genio estaba nervioso, y Harry sintió que su corazón se aceleraba en respuesta, como si hubiera escuchado a Hermione describir cuando Ron había logrado actuar. No es que Harry alguna vez lo admitiera.

Realmente esperaba tener razón sobre lo que Tony estaba a punto de hacer, de lo contrario Harry tendría que hacerlo él mismo ahora que la idea se había plantado firmemente en su mente.

Tony le abrió la puerta del auto a Harry, inclinándose para besar su sien antes de cerrar la puerta. Para cuando el otro hombre hubo recorrido la parte trasera del auto hacia el lado del conductor, parecía haberse calmado un poco. Al menos lo suficiente como para que Harry ya no temiera que chocaran contra un árbol.

"¿No vas a volver a preguntar?" -Preguntó Tony, arrancando el auto con un rugido bajo.

"No. Sólo vamos a dar una vuelta, dijiste. Harry sabía que estaba sonriendo un poco. "Solo asegúrate de ir rápido y yo podré tener paciencia".