0- Ser adulta

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Como cualquier persona intento descifrar como ser adulta. Al menos una adulta funcional y responsable.

Pero todos sabemos que eso no es nada fácil, más para generaciones como la nuestra, en la que nos han dejado un planeta en agonía y miles de problemas que resolver. ¿Por qué nos siguen considerando generaciones de cristal?

—... así es como podemos deshacernos de todos —volteo hacia mi amiga.

—¿Qué? —estoy confundida, tan siquiera sé de qué hablábamos hace 5 minutos.

—Que no estabas en este mundo —sonríe mientras empieza a caminar, la sigo sin pensarlo mientras sigue hablando —, parece que te volviste a perder entre tus pensamientos —sonrío, parece que ella realmente me conoce.

—Es solo que —suspiro, pensar debería ser mi segundo nombre —... no quiero regresar a la oficina, estoy cansada —ella asiente mientras emite un "umh" —. ¿No crees que la vida es muy —hago una pausa para pensarlo, realmente quisiera encontrar una palabra para describirla —... meh? —aunque lo intente, no es tan fácil de describir.

Sonríe —Sí, es muy "meh" —dice en tono de sarcasmo, sonrío porque también entiendo que es un término muy ambiguo e infantil —, pero fuera del chiste —suspira — así son las cosas, si no trabajamos, ¿cómo sobrevivimos? —nos acercamos al edificio donde trabajamos, ambas suspiramos antes de seguir caminando y entrar al edificio.

Supongo que preguntas como esas no tendrán respuestas, la verdad la vida se ha convertido aburrida desde..., ¿desde cuándo?

No recuerdo la última vez que pude reír sin compromiso o la última vez que me desperté sin desear que fuera fin de mes, porque seamos realistas, gastamos más de lo que ganamos y posiblemente debemos todo. ¿Cómo llegamos a este punto?

Recuerdo de niña desear tanto ser adulta, poder maquillarme, uñas de colores, comprarme zapatos de tacón y andar hasta en mi casa con ellos, pero nunca pensé en que ser adulto es más aburrido y cansado de lo que veía en mis padres.

Supongo también que, de niña, siempre fui injusta con ellos. Claro que para mí las cosas eran más fáciles y ellos eran malos y siempre decían que "no" o eran muy complicados, pero la realidad es que la vida es complicada, ellos solo intentaban sobrevivir.

—Samantha —suspiro antes de ver a mi jefa, esa voz es imposible de olvidar —, necesito que vengas a mi oficina —asiento mientras busco mi agenda. Maldita agenda que se roba mi vida.

—Pss —mi amiga voltea a verme —, guárdame mi jugo —la señalo —, no te atrevas a acabártelo —advierto, ella levanta su mano a la altura de su hombro y asiente, prometiendo no beberlo. Corro para llegar rápido a la oficina de Ana, mi jefa.

—¿Recuerdas que tengo una reunión a las 3? —Respondo con un corto "Sí", mientras busco entre mis garabatos donde lo apunte, porque realmente no lo recuerdo —Cancélala, no quiero ver a ese desgraciado —asiento mientras escribo "cancelar reunión de las 3" —. Además, necesito ver los folletos de la siguiente campaña, ¿acaso nadie está preocupado? —me encojo de hombros, creo que nadie lo está —, está a la vuelta de la esquina y a todos les importa una... —regreso a mis pensamientos un rato más, solo para ahorrarme escuchar como insulta a sus empleados que "son una familia" para ella —. Y apunta ahí —señala mi agenda, la odio — "No volver a usar amarillo porque no se ve bien en mí" —me detengo en el "porque", es una perdida de tiempo.

—Si eso es todo, me retiro —la odio, la odio, la odio, la odio, sonrío mientras ella asiente terminando nuestra nada agradable reunión.

—Ah, lo olvidaba —antes que pueda salir habla, me muerdo los labios conteniendo mis palabras y sonrío antes de voltearme —, hoy voy a almorzar aquí y el del delivery no puede venir, ve tú —asiento ampliando más la sonrisa.

—Muy bien —salgo con prisa y cierro la puerta tras de mí, suspiro mientras recojo mi pelo, ¿cuándo empezó a hacer tanto calor? —Maldita, te odio —suspiro nuevamente, hoy realmente quiero llorar.

—Miri —mi amiga voltea hacia mí luego de acercarme a su escritorio —, ¿puedes darme la dirección de ese lugar que a Ana le gusta comer? —ella asiente mientras escribe la dirección —. Gracias —digo al recibir la dirección. Tomo mis cosas y camino hacia la salida.

Es viernes, fin de mes, hay un calor de mierda y encima debo priorizar la comida de mi jefa. ¿No es perfecto?

Voy a llorar.


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⏰ Última actualización: Jun 23 ⏰

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