En silencio || RadioSilence

Prólogo.

— Te amo, Alastor. Pero no eres mío.

Esas fueron las palabras del líder de los Vees. Tenía una foto del demonio radiofónico en su mano, sujetándola, con una sensación de melancolía que recorría su cuerpo y nublaba la mente del Overlord. Solamente recordaba los viejos momentos que solía tener junto a Alastor, aunque el amor no era correspondido, al menos tenía su amistad...

Todo cambió cuando lo quiso invitar a formar parte de los Vees, se hizo un caos y ahora mantienen un odio, aún así eso le duele demasiado a Vox, pero sabe ocultarlo muy bien como para que piensen que lo odia a muerte.

— Eres un capricho, algún día te tendré. — aseguró el demonio de pantalla plana, tirando la fotografía del pelirrojo y dando un golpe a su mesa, haciendo que por poco se dé un corto circuito.

— Esa estuvo cerca. — murmuró el líder de los Vees.

Al final se terminó cansando de estar como perra llorona por un hombre, así que se sentó y empezó a tomar un poco de café, hasta que escuchó a alguien acercarse, volteó a ver, visualizó a un hombre bastante alto con apariencia de polilla... Ah, es Valentino.

— ¿Qué mierda haces acá, Valentino? — voceó el fundador de VoxTek.

— Nada, mi princesito. Perdón por molestarte, quería venir a ver qué tan hecho mierda estás. — vaciló el actor, pasando su mano por el dorso del de pantalla plana.

— Agh... Ahorita no estoy para tus juegos, ¿podrías irte? — habló enfadado el demonio.

Valentino soltó una mueca de desagrado ante la contestación de su amigo, quitó su mano y decidió irse de la oficina del Overlord.

— Todo eso pasó hace mucho tiempo, no entiendo por qué sigues resentido, Vox. — gritó el hombre polilla.

"Tiene razón." pensó Vox, al final del día, todo eso sucedió ya hacía décadas, es una tontería seguir lamentándose eso.

¿Por qué no simplemente olvidarlo? Si tan solo fuera tan fácil...