Tan tierno~ (TsugeKiryuu)

Capítulo 2

Hacía calor, pero no le molestaba, todo lo contrario, era tan agradable que no hizo más que aferrarse con fuerza a su dakimakura, pero rápidamente recordó lo de la noche anterior, abriendo los ojos de golpe sólo para encontrarse envuelto por los fuertes brazos de su compañero de clases, quien tenía el torso descubierto; Kiryuu casi suelta un chillido al darse cuenta, pero logró contenerse, pues no quería desaprovechar la oportunidad... Con timidez, pasó su diestra por los abdominales del mayor y se sorprendió ante lo firmes que eran, mordió un poco su labio inferior y volvió a abrazarlo, apoyando su frente contra su musculado pecho, sintiendo como el contrario acariciaba suavemente su cabello

- ...estás despierto? – preguntó Tsugeura con voz ronca

- S-sí – respondió ocultando su sonrojo; casi le da algo al oírlo hablar así, no podía creer lo erótica que sonaba su voz por las mañanas

- No pasé a patearte o algo así mientras dormíamos? – Mitsuki negó – Que bueno – suspiró aliviado – Esto... podrías soltarme? Necesito ir al baño

- Claro... – y lo dejó levantarse ocultando su descontento

Mientras Taiga estaba en el baño, el menor aprovechó para vestirse y peinarse, verificó su aspecto un par de veces en el espejo y una vez estuvo contento con el resultado, bajó las escaleras para ver que podía preparar para el desayuno, sorprendiéndose al ver a su madre y a su hermana comiendo juntas

- Qué hacen despiertas tan temprano? Es sábado

- Nada en especial – dijo su madre – Durmieron bien?

- Si, muy bien – sonrió el de los piercings acercándose a la alacena, viendo qué de lo que había podría gustarle al de rizos anaranjados

- Hay yogurt griego en el refrigerador – comentó su hermana – Crees que le guste?

- Eso espero

- Buenos días – saludó el de ojos marrones entrando a la cocina

- Buenos días, Tsuge-chan~ – dijeron las mujeres al unísono, pillando desprevenido al halterófilo

- E-esto... – se puso tan rojo que parecía que se iba a desmayar, una vista demasiado adorable para el frágil corazón de Mitsuki

Apenas terminaron de desayunar, los dos adolescentes discutieron qué podrían hacer durante el día, pues el pelirrosa normalmente se quedaría en casa todo el día jugando videojuegos, pero sabiendo lo activo que era su compañero, estaba seguro de que se aburriría y no quería eso, pero tampoco quería salir a correr con él y terminar todo sudado, sintiéndose súper inteligente cuando cierta idea se le vino a la cabeza

- Y si vamos a un Arcade? – sugirió y el mayor parecía bastante sorprendido

- Seguro? No soy tan bueno en los videojuegos como tú, me da miedo que por mi culpa perdamos todo el tiempo

- Nada que ver!! Ganar no lo es todo! Además hay cosas que sé que te podrían gustar~ Venga, confía en mí~

- Eso siempre lo he hecho – dijo sonriendo ampliamente, provocándole otro mini infarto... Se preguntaba seriamente cómo iba a ser capaz de sobrevivir a su ternura todo el fin de semana

Kiryuu fue a su cuarto, tomó su riñonera y en ella guardó todo lo necesario para su aventura, se puso bloqueador solar y algunas pinzas en el cabello, saliendo de casa acompañado de un entusiasmado Tsugeura, quien parecía mucho más contento que de costumbre. Tomaron el transporte público y se bajaron en el centro, caminaron un par de calles y finalmente llegaron a su destino, un enorme Arcade lleno de luces y música