El sonido de tacones inundaba el pasillo de colores cálidos. Resultó ser una mujer de tez bronceada que portaba un vestido blanco como si tratara de una sirvienta. Ella se dirigía a una puerta de madera bastante grande, cuando llega a esta se detiene justo al frente y toca tres veces.
(Toc toc toc) el sonido resuena del otro lado de la puerta.
Un joven robusto de largo cabello dorado y desordenado se encontraba dentro. Durmiendo completamente arropado con una sábana de piel de tigre en una gran cama junto a la pared con ventana mediana. Los rayos de luz que entraban por esta iluminaban todo el cuarto, desde el armario de roble rojo, pasando por los gabinetes hasta llegar a su peinadora.
— mmm...—
Los golpes en la puerta se repetían interrumpiendo el sueño del joven (Toc toc toc)
— ¿Príncipe Víctor?— la señorita llamó al joven repetidas veces, pero al no escuchar respuesta abrió la puerta para hablarle directamente al príncipe.
— ¡joven Víctor, despierte!—
— ¿ah, qué sucede?...— se levantó exaltado por el llamado tan brusco.
—Joven Víctor, tiene que levantarse para ir a desayunar, debió estar despierto hace media hora. —
—está bien ya...ya voy.—soltó una gran bostezo mientras estiraba los brazos.
— no tarde, esperan por usted.— salió de la habitación sin cerrar la puerta.
El joven príncipe con algo se sueño se levantó de la cama. Luego caminó hasta su armario para sacar dos prendas de su ropa diaria. Una camisa de botones sencilla de tonos rojizos y dorados junto a un pantalón con los mismos colores, cabe resaltar que ambos tenían bordado el escudo de la familia en hilo rojo sangre. Una vez vestido, mientras peinaba su dorado cabello volteó a admirar dos carteles que están en la pared siguiente de su cama. Primero admiró al cartel blanco de la izquierda.
—ah... Cael el gran espadachín mago de los cinco reinos, proveniente del reino de Airoria...—
— oh... y cómo olvidar al increíble Ceestus el poderoso mago espadachín de todos los reinos, proveniente de esta misma tierra, Magnolia...—dijo admirando al cartel rojo de la derecha.
— ¡Joven Víctor le están esperando!— Habló la sirvienta desde fuera de la habitación asomándose por la puerta.
—¡ya iré!...ah algún día llegaré a ser como ustedes.— Dijo el joven Víctor echándole un último vistazo a los carteles con retratos heroicos de tales leyendas antes de salir de su habitación.
El joven príncipe se dispuso a caminar por el mismo pasillo por donde vino la mujer para luego bajar un par de escaleras. Las pisadas de las botas de Víctor producían eco en los pasillos. Víctor es en joven grande y alto, él no es tan grueso como su padre pero si contaba con una musculatura desarrollada para sus 18 años. Desde siempre él ha sido un gran fanático y admirador de los espadachines, agregando que su padre es un excelente guerrero espadachín. Fueron las motivaciones perfectas para entrena todos los días desde pequeño esgrima. Magnar, su maestro, es quien lo impulsa a llegar a ser una leyenda como sus héroes.
Al finalizar las escaleras el joven llega a un pasillo que lo conduce hasta llegar a una gran sala que daba camino a tres direcciones. Unas escaleras de frente, una gran entrada de dos puertas de madera a su izquierda y una aún más grande a su derecha. Víctor tomó la opción de la izquierda. Esto le llevo a una gran vista de un inmenso patio con árboles de palmeras, se encontraba en el patio interno del castillo. Camino a través del césped ignorando el camino de piedra dirigiéndose a unas escaleras blancas que daban paso al segundo piso, su objetivo, el comedor privado de la familia. Al entrar encontró a su familia desayunando sentados en una refinada mesa de madera, habiendo personal como cocineros, meseros, guardias reales con armaduras doradas en la habitación.
ESTÁS LEYENDO
Guerra de Vapor: Historia de Víctor
ActionUn joven príncipe de un reino de fuego es forzado por su padre a participar en una guerra durante 10 años. Está es la historia de un chico de buenos valores que vivió los horrores de la guerra convirtiéndose en un monstruo sin piedad.