La puta verde.

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Jaehaera temia por su vida siempre, desde que se levantaba hasta acostarse, todos murmuraban que debía morir la última verde, el corazón de la pobre mujer se apretaba y sus ojos se llenaban de lágrimas, no ansiaba morir, aún no, había prometido a aegon que se quedaría con el.

Quien tramaba la muerte de la joven reina era Lady Baela targaryen, quien no soportaba ver a su hermano menor con aquella zorra de verde, por más que la reina tuviera prohibido usar el verde o todas sus prendas de aquel color fueran quemadas hasta las cenizas, Baela ansiaba poner a daenaera como reina, una Velaryon que podría ser mejor que esa estúpida niñita que no hablaba.

Asi fue como en su desesperación jaehaera se volvió más cercana a aegon buscando salvar su vida, se decía que el rey y su reina pasaban horas juntos, pero, aquello fue para poder pedirle a su marido cambiarla de habitaciones, tenia un plan para que su esposo viera lo que lady baela tramaba. Y así fue como la reina targaryen fue cambiada de habitacion hacia las de el torreón de Maegor, donde se tiró la reina helaena, donde su abuela paso sus últimos suspiros, suponía que esto sería una tradición para los verdes... Morir frente a el rey cruel.

Asi mismo una de las noches había llamado a su esposo para que fuera a sus habitaciones y cuando pensó que el hombre era quien topaba la puerta se "sorprendió" al ver a la targaryen mayor, Baela con su espada enfundada, pero sabia a lo que venia.

— ¿Piensas matarme? —

Fue tanto una pregunta como una afirmación, la chica más joven lo sabía, sus huesos se lo decían, su corazón palpitando se lo estaba advirtiendo y todo su sistema pedia a gritos que saliera lo más rápido posible, pero Baela seguía en la puerta sin darle escapatoria.

— ¿No es claro? No permitiré que mi hermano este con una bastarda verde —

La Lady se burló y jaehaera trago con fuerza una risa ansiado salir de sus labios, mirando a la Lady frente a ella, solo alzo en mentón agarrando su vestido rojo con fuerza.

— ¿Una bastarda? No soy ninguna bastarda, no como tú marido —

Se había armado de valor y refutó contra la targaryen, el fuego comenzado a arder lentamente sobre la reina, ella no era una bastarda y lo iba a hacer saber.

— Que... Que fue legimitado por una reina de medio año, mientras que ante los dioses y El verdaderos Rey sigue siendo un bastardo, incluso mi marido jamas legimito al tuyo. —

Jaehaera gruño con fuerza, el fuego ardiendo en una llama suave, ella lo sabia Baela estaba empezando a ver en rojo por eso mismo su mano fue hacia el mango de su espada, pero la mujer no sabía que su marido estaba a la vuelta de la esquina.

ERES UNA ZORRA VERDE, COMO TU ABUELA.

El valyrio se escuchó con fuerza y jaehaera sintió las ganas de cubrirse los oídos, pero se mantuvo recta y mirando a Baela con aquellos ojos sin vida que podían hacerle pare a los ojos de él rey aegon iii, muchos decían eso.

— ¡Es la verdad! Un bastardo al dominio de marcaderiva, que vergüenza.

No sabía de donde venía tanto valor para seguir hablando, sus ojos estaban llenos de lágrimas que no pensaba derramar y el sonido de una espada siendo enfundada ella sabía cual era su destino, pero no moriría sin decir sus últimas palabras.

— Espero que cuando traigas a daenaera mi esposo la acepte. . . Su propia hermana asesinando a su reina, qué dirá el consejo. —

Baela se había acercado a la chica y agarro con fuerza sus mejillas, jaehaera ansio dar un paso hacia atrás, pero no lo haría podía escuchar los pasos de los guardias y su marido acercarse.

— Como si a mí hermano le importaras, Puta verde

Incluso antes que la espada hiciera contacto con su piel sintió como unos brazos la rodeaban y como su corazón latia de forma desenfrenada. No escucho la pelea que se armaba, pero si sintió los brazos protectores de su marido, comenzó a sollozar con fuerza y se apretó más a el hombre, estaba aterrada, el corazón lo tenía en nudo en su garganta, las lágrimas corrían por sus mejillas tal cascadas, aunque la caricia suave en su cadera le daban apoyo, sabía que no estaba sola, su marido estaba con ella.

𝐆𝐑𝐄𝐄𝐍 𝐅𝐀𝐌𝐋𝐈𝐘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora