02- Encuentro

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- Hola - saludé por educación

- Soy el único que pasa desapercibido, debido a eso, te vengo a buscar - me sonrió

- Amm, disculpe, ¿Le conozco? - le mire extraño, creo que ya ha visto su error, de que se ha equivocado

- Emm, ¿Romeo? - me preguntó

- No, Gustabo García - le di la mano

- Raúl Rubier- me agarró la mano y nos saludamos - Mil disculpas, me equivoqué de persona

- No se preocupe, y no estoy seguro, pero aquí no hay ningún chico que se llame Romeo, pero pregúntale a un poli que pasé - le mire de arriba hacia abajo, tenía una cresta rubia, unos hermosos ojos verdes, aparentaba ser joven, iba con un buzo verde oscuro, unos jeans negros y unas playeras Vans blancas.

- Am, okey... Gracias supongo - me dio una media sonrisa

- Disculpa, Raúl, de por casualidad ¿sabe donde está el concesionario? Esque ni idea de dónde está - le di una risa nerviosa

- Claro, pero si me permite primero preguntar por el chabón, esque me dijo que trabajaba cerca de comi- ¡Pero que boludo que soy! aquí no está, está en la heladería, mil disculpas, pero yo le llevo allí - me sonrió

- Gracias, de veras - le sonreí, ambos caminamos hacia su coche, un deportivo negro, no está mal eh

- Gustabo, ¿Eres de aquí? - me miró mientras subía al coche

- Ammmm, si más o menos, no nací acá pero si vivo desde hace mucho aquí - el arrancó el coche

- ¿Pero no deberías tener un auto si ya llevas tiempo aquí? - esa pregunta me hizo gracia

- Ya pibe, pero lo regalé - le sonreí

- ¿!Pero sos pelotudo!? - me miró con enojo - yo no te conozco flaco, ¡pero no debes darle tu auto a cualquier chabón!

- Raul tranquilo, tengo dinero, aparte ese coche lo regalé para abandonar una etapa, es igual que cuando tenga el coche iré a recoger mis cosas de una casa y me comprare un departamento - le puse la mano en el hombro - son etapa, y hay que cerrarlas bien

- Bueno flaco, acá te dejo sos re buena onda y re lindo - me sonríe

- Gracias guapo, me pasas tú número, a ver si quedamos para tomar algo - le sonrió amablemente - como toma de agradecimiento

- Claro - nos pasamos los números y el se fue en su coche

Entre al concesionario y compre el Lamborghini Huracán Evo de color negro. Bueno 250.000€ al concesionario. Me dieron las llaves, me subí y joder si que tiene velocidad, esto a el le encantaría.

Fui a varios mecánicos, los cuales estaban cerrados, no quería ir, no quería verlos, si ellos estuvieran aquí me estarían insultando, aparco para pensar. Todavía debía ir a comprar una casa, aparte ya amenace a esa gente y no una solo vez.

Pero está vez tenía miedo, pero del de verdad. No por mi vida, si no por mi mentalidad, no quiero ser tan cobarde, mis hermanos no me criaron así. Arranque el coche y fui hacia los mecánicos, mi corazón latía fuertemente, como si se me fuera a salir. Agarre todo el aire que mis pulmones podían y lo solté lentamente.

Aparqué en su parking, vi a varias personas con monos, supuse que eran trabajadores, me acerqué hacia ellos.

- Disculpen interrumpirlos, pero, ¿Trabajan aquí? - mi voz pareció que los asustó

- Ah si - me contestó un chico de trenzas desde la raíz rubio - ¿Que necesitas?

- Vengo a hacer un full tuning a mi coche porfavor, es ese Lamborghini Huracán - le señale el coche

TRAICIÓN/ LUKABOWL-GUSTABOWLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora