Hasta que la muerte nos separe

Comienzo

Edificios hechos pedazos, escombros en todo el perímetro e incendios era lo menos importante que Shiori estaba viendo ya que frente a ella se encontraba un Kaiju con sus padres en mano.
"¿Por qué soy tan débil?, ¿Por qué tenía que ser mi familia? Solo me queda ver como el Kaiju devora a mis padres y próximamente a mi"
La chica solo se quedo de rodillas frente al Kaiju con ojos ya sin brillo bajo la mirada al piso para no ver la muerte de las personas que más amaba, cuando se escuchó un "crack" liquido rojo espeso comenzó a pintar los escombros y ella solo se quedó congelada al sentir gotas que salpicaron en su cara. Un segundo "crack" sonó, era cuestión de minutos para que el Kaiju la matará.
Shiroi ni siquiera se había dado cuenta de que 3 vehículos militares se estacionaron detrás de ella, un soldado que venia en aquellos vehículos corrió hacía la chica y la tomó en brazos, salieron de aquel lugar.
-Ya tengo a la chica, la dejaré en el refugio y regreso capitana.- Un chico que por su apariencia parecía de 18 habló para reportar que había sido rescatada.

Shiori con la mirada todavía perdida volteó hacía arriba para poder visualizar a su salvador, pelo azabache con un toque morado, ojos rasgados y piel pálida es lo que ella identificó. "Su cuerpo es muy cálido" pensó y se acurrucó más hacía el que ella ahora llamaría su salvador. El chico miró hacia abajo y se encontró con la chica de pelo castaño oscuro durmiendo "pobre chica, no llegamos a tiempo para salvar a sus padres" pensó el mayor mientras dejaba a Shiori en el refugio donde ya habían muchas personas.

-Disculpa podrías encargarte de esta chica, casi es comida por el kaiju, te la encargo- dijo el chico a un soldado que estaba ahí cuidando de los refugiados. Cuando intentó darle a la chica en brazos esta se aferraba más a el hasta que este la sacudió un poco y la chica entre abrió los ojos - Ya estas a salvo, tengo q volver con mi escuadrón por favor quédate aquí a descansar- Le dijo con una sonrisa, la chica cedió y puso los pies en el suelo.

-Gracias por salvarme- dijo la chica haciendo una reverencia y con lagrimas en los ojos levantó la vista -Prometo volverme fuerte para que no vuelva a suceder- el chico puso una mano en la cabeza de la chica y revolvió su cabello -descansa- el chico antes de salir del refugio se giró hacia la chica -Soy Hoshina Soshido- y salió corriendo a donde su escuadrón estaba peleando.