Emili siendo una chica joven que trabaja como sirvienta en el castillo Dimitrescu logra enamorar a la gran Madre Miranda líder de la aldea.
Emili quedará entre la espada y la pared al enamorarse de la poderosa y peligrosa Madre miranda.
Y con el tie...
Lady dimitrescu salió,No se dónde,No quiso decirme ni a sus hijas. Pero dijo que yo quedaría a cargo de el castillo.Algo que no me convenció mucho,Pero acepté con tal de que las niñas no se porten mal.
El castillo estaba en silencio,No había ni un solo ruido.Apesar de que si le acercas a las ventanas se puede escuchar el viento por fuera soplando y silbando fuertemente.Afuera nevaba y hacia demaciado frío.
Las niñas están cada una en sus habitaciones,Y yo di el permiso de que la servidumbre se tome un descanso.
Yo camino tranquila por el castillo,Disfrutando de la tranquilidad y mi pequeño descanso de órdenes. Hasta que llegue a una de las salas más grandes del castillo. Un sala la cual nunca ningúna de las Dimitrescu suele frecuentar,Ya que está algo alejada de la parte principal del castillo. Yo soy la única que viene aquí para limpiar y para más que nada descansar un poco mi mente de todos estos días.
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Entre y fui directamente a el piano que se mantiene perfectamente limpio y cuidado por mi.
Me sente en el banco largo frente al piano,Y sutilmente toque el piano con mi manos, Sintiendo el lo más profundo de mi corazón las ganas de tocar la melodía que se repite una y otra vez todos los días de mi vida.
Suspiré,Cerré los ojos y comenze a tocar el piano con mis dedos, Sintiendo cada una de las teclas hundirse ante mi toque y sonando una maravillosa melodía que recorre mi cuerpo de principio a fin,Entrando por un oido,pasando por mi corazón y saliendo por mi otro oido.
Podía sentir el ritmo de la melodía seguir el ritmo de mis latidos del corazón, Sintiendo lo profundo que puede llegar esta melodia a mi ser,Traspasando mi alma,Congelar mi corazon y dejarme totalmente vacía por dentro.
Al terminar la melodía una lágrima se escapó por uno de mis ojos cerrados,Los abrí y me seque la lágrima. Al abrirlos y ver frente a mi,Vi con sorpresa a Miranda sentada en uno de los sofás frente a mi.Asustandome casi cayendome del asiento del susto.
—Ay Madre miranda...Que susto me dió.—Dije y me lleve una mano al pecho.
—Que bella melodía...Tocas el piano perfectamente.—Hablo ella parándose y acercándose a mi.
—Gracias Madre miranda.—Agache mi mirada a mis manos que se mantenía aún en piano y las mire.
—Por que llorabas? Acaso te apasiona tanto está melodia?—Escuche su voz en mi oreja,Me gire y la Vi parada detrás mío,Susurrandome en el oido.
—Ah...No es,Está era una melodía que compuse para alguien especial en mi vida.—Dije y devolví mi vista al frente.Y sin darme cuenta Miranda ya estaba sentada a mi lado en el piano.
