Antojos

Mini Shot

Max veía el atardecer en su casa ubicada en Mónaco, bebía su te de manzanilla que le quitaba un poco los malestares que le aquejaban en ese momento. Aunque no se arrepentía en ningún momento de tener esos malestares ya que en su vientre blanco llevaba a su dos pequeños girasoles.

Max había quedado embarazado después del festejo que conmemoraba el primer campeonato de su amado Sergio Pérez, había luchado por este todo la temporada 2024 y aunque algunas veces lo vio perdido se repuso y al final se llevó ese reconocimiento. Lo primero que hizo fue llorar de la emoción y cuando pudo bajar del monoplaza corrió hacia los brazos de su amado Max que lo veía con los ojos llenos de lágrimas de alegría.

S: Lo logre mi amor!!! Lo logré!!
M: Si mi solecito lo lograste, felicidades mi amor, felicidades viejo sabroso!!!

Sergio abrazo a Max y lo cargo dándole vueltas para finalizar besándolo frente a todos sin importar lo que dijeran, a él solo le importaba su amor por Max. El festejo fue en grande, se habían trasladado a Mónaco para haya realizarlo, Alonso había prestado su yate para que se hiciera la fiesta que tuvo muchos invitados entre ellos el expresidente Felipe Calderón, el boxeador Canelo Álvarez y el mejor amigo de Max: Martin Garrix.

La fiesta se elevó hasta altas horas de la noche, todos disfrutaban del ambiente pero el festejo tenía su propia fiesta privada en la recámara principal de ese yate.

Las vacaciones de invierno llegaron y con eso un merecido descanso para ambos pilotos los cuales pasaron navidad con la familia de Max y año nuevo con la familia de Sergio.

No quería que las vacaciones acabarán pero era tiempo de volver al trabajo y el día de la presentación del nuevo monoplaza, Max había despertado con muchos vomitos y se lo atribuyo a la cena de la noche anterior, tomo un calmante y se fue con Sergio a la presentación. Cada minuto que pasaba le producía más y más ganas de vomitar, cuando termino salió corriendo al baño donde vacío su estómago, Sergio lo había encontrado llorando en el baño.

Lo levanto y abrazo, Max temblaba en sus brazos debido a que tenía la leve sospecha de su estado, así que con valor se lo dijo a Sergio el cuál quedó callado tratando de procesar la noticia. No dijo nada y tomo a Max del brazo hasta llevarlo a su camioneta donde condujo hasta un hospital privado para que le realizarán las pruebas pertinente. Después de unos minutos atormetantes la enfermera le entrego el papel con los resultados, Sergio fue el primero en verlo y sus ojos se llenaron de lágrimas, Max vio el papel y el resultado era positivo. Se abrazaron y lloraron de la felicidad.

La revelación de que Max estaba en cinta se dio a conocer después del GP de Arabia diciendo que seguiría corriendo hasta donde se le era permitido por su médico y así lo hizo a los 6 meses se retiró para descansar.

Ahora en el paron de verano miraba la lluvia golpear el cristal de su ventana y acariciaba su vientre prominente recibiendo pataditas de sus dos pequeños girasoles, Sergio llegó más noche trayendo consigo helado de fresa para su esposo.

Eran las 9 PM en Mónaco cuando Max no podía dormir, esto hizo que Sergio se despertara.

S: Amor que pasa? Te sientes mal? Están bien los niños?

Max no contesto y comenzó a sollozar bajito, eso preocupo a Sergio Max era una persona sensible y se había vuelto mucho más con el embarazo.

S:Cielo que pasa?

Max no contesto y siguió llorando bajito mientras abrazaba a Sergio por la cintura.

M: Es que a tus hijos y a mi se nos antojo algo? Pero ya es muy tarde.

S: Nunca es tarde para complacerlos, que quieren mis preciosos? Helado? Chilaquiles? Fresas con crema?

M: Queremos elotes con chile, como los que comimos en Guadalajara esa vez que fuimos 🥺🥺🥺

Sergio sabía a cuáles se refería pero era un viaje de aproximadamente 4 horas, tomando el jet de Max. Era arriesgado pero no le podía decir que no a su amado.

Así que le pidió que se vistiera con su pantalón de maternidad y se abrigara bien, hizo una llamadas y en 1 hora el jet estaba listo. Llamo a su madre para que les preparara la habitación de huéspedes ya que no quería que viajará de nuevo. Cuando todo estuvo listo fueron al aeropuerto que los llevaría por el antojo de sus amores.

Habían llegado con bien y la camioneta que había rentado ya los esperaba para llevarlos a dónde quisieran pero Sergio despidió al chófer y llevo a Max a cumplir su antojo. Llegaron al pequeño y modesto puesto de elotes en la calle, Sergio bajo primero y saludo al dueño, después se acercó a la camioneta donde un adormilado Max estaba.

S: Despierta solecito, te tengo una sorpresa.
M: Sergio, que pasa?

No pudo decir más porque sus ojos brillaron de la emoción ahí frente a el estaba aquella puesto de elotes del cual anhelaba comer, con cuidado se bajó de la camioneta y sento en una silla que le entregaron.

Mientras Sergio pedía dos elotes con chile del que no pica, ya que Max no estaba acostumbrado a comer picante, cuando se los entregaron se los llevó a su esposo el cuál platicaba con la esposa del dueño y acariciaba tiernamente su vientre.

Sra. : Serás un excelente padre, ambos lo serán, felicidades a los dos y nosotros siempre estaremos felices de atenderlos.

M: Gracias!!

Sergio estrecho la mano de la señora la cuál los abrazo dulcemente.

Sergio entregó el elote preparado a Max y este sin esperar lo comió con gusto, Sergio solo lo veía toda su boca estaba llena de mayonesa y queso se veía tan adorable. Incluso mucho más de aquella tarde en la cual el se había enamorado de Max, lo siguió observando disfrutando como Max sacaba su antojo.

Max lo noto y le sonrió para luego darle un beso en los labios compartiendo el delicioso sabor del elote con chile del que no pica.

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