♦️¡Una Ranchera En Acción!💙 || Beatrix LeBeau. Una Historia de Slime Rancher

Las Colinas Escondidas

El agua la ponía en una pequeña playa a las orillas del Mar, con la arena en la ropa y el sol en el rostro.

Se podía observar a Beatrix, desmayada después de haber estado en el agua.
Un Slime atigrado ya se había posado y dormido sobre ella.

Cuando de pronto.

Beatrix: *Cof* *Cof*

Tosió mientras se sentaba rápidamente expulsando toda el agua de sus pulmones.

Beatrix: A-au... mi cuerpo me duele...

Movía su hombro adolorido mientras quitaba de encima al Slime.

Beatrix: ¿Dónde...? ¿Dónde estoy?

Se puso de pie con dificultad mientras posaba la mirada en el camino de tierra.

Beatrix: Esto no parece ser algún lugar que haya visto... Espera... No recuerdo bien aquellos lugares... ehmm...

Se puso pensativa.

Beatrix: De echo... no recuerdo para qué servía...

Miró su Vacpack en mano.

Beatrix: Si muevo...

Moví de espacio mi Vacpack, pero no tenía nada.

Beatrix: Esto es raro... No recuerdo cómo llegué aquí, no hay barco y... parece...

Intenté mirar mi espalda.

Beatrix: Lo que me faltaba... perdí el Jetpack.

Puse mi mano en mi cabeza molesta, pero al momento me la quité.
Y miré mi mano.

Beatrix: ¿Eso es sangre? Ahora tiene sentido el porqué no recuerdo mucho...

Miró a su par, aquél pequeño Slime atigrado comiéndose una Gallinallina.

Beatrix: Parece que aún sigo en este lugar...

Suspiró.

Beatrix: Voy a ir a buscar algo para mi cabeza, me siento algo mareada.

Emprendió su camino hacia la pequeña colina que estaba ahí para cruzar al otro lado de la playa.
Cuando llegó a la pequeña cima.

Beatrix: Por el amor de slime...

Bajó su Vacpack, sorprendida por la vista de una gran montaña al centro de la gran isla.

Beatrix: ¡No eh estado aquí antes!

Al alzar mi Vacpack miré un Nodo del Mapa, al abrirlo, una señal llegó a mi Vacpack, le quité una pieza al Vacpack para verla más fácilmente, allí se habían despejado una señal y me había mostrado parte de la isla.

Beatrix: "Las Colinas Escondidas: Un lugar más lejano que La Lejana, Lejana Pradera, tan escondido que parece nunca haber existido." Creo que este lugar no es muy conocido al parecer.

Me dió un dolor de cabeza.

Beatrix: ¡Cierto...!

Bajé rápidamente la colina y me fuí a un invernadero frente a mi a buscar algún suministro para ayudarme.
Llegué al lugar, y sin prestar mucha atención me senté en una silla tomando el kit de primeros auxilios, y me empecé a limpiar la herida y vendarmela.