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Me siento detrás de todo el mundo donde nadie pueda verme, tengo a personas con quien hablar pero así me siento mejor, que donde estoy ?, en el "amado" colegio.

El profesor comienza presentándose y quiere que nosotros hagamos lo mismo, no me gusta eso porque si alguien quisiera hablar contigo te lo pregunta a ti, así que no les presto atención y me pongo a leer un libro, de los tantos que tengo, y me voy a un estado donde nadie me molesta ni yo a a ellos.

Alguien me toca el hombro, parece que es mi turno de presentarme. Me paro y les digo...

- Mi nombre es A, tengo 13 años por lo cual no soy una pitufa, solo no debería ser tan alta y me encanta leer - me senté y seguí leyendo 1000 formas de morir.

Alguien me vuelve a tocar el hombro, pesadamente cierro el libro con un dedo donde lo deje y miro al compañero que no me quiere dejar leer pero, cuando volteo todo el mundo me esta mirando, por lo cual le pregunto al muchacho, que no me se su nombre por no escuchar, el me mira como si yo lo fuera a matar pero, en vez de el me responde el profesor.

- Señorita, usted no puede estar leyendo en mi clase un libro que no es de la materia, ahora pues voy a explicar la clase, y no creo que se lo sepa señorita - me informa. Y yo que no tengo pelos en la lengua le respondo muy sencillamente...

- Disculpe profesor que le contradiga pero, 1. Es el primer día de clases, todavía no se da clases. 2. No debería hablar sin saber, pues profesor yo me eso como la palma de mi mano - camine hasta la pizarra con mi libro en la mano, cogí el marcador, le resolví la inecuación de matemática, me volteé a mirarlo y le dije...

 - 3. Este libro está demasiado interesante para dejarlo ahora así que si me disculpa, me voy a sentar - y me fui a mi silla, con mi sombrero negro tapando una parte de mi cara, mi libro en mano, mis vans grises, mi pantalón largo y ajustado, porque no he podido ir a comprar pantalones ya que todos me quedan casi pequeños, y un poloche de mi hermano mayor.

Seguí leyendo tranquilamente hasta que la hora termine, solo me faltaban 250 razones, osea 15 minutos pero nadie pregunta antes de hablar. Ya toca la siguiente materia, español, pero como no quiero mas problemas guardo mi libro. 

Siempre español lo da UNA profesora pero hay UN profesor, que tiene unos 18 años, mas o menos, no lo se. Y como ya sabía yo las muchachas ya se están balanceándose sobre el, así que cogí mi libro y seguí leyendo pero, como hoy es el día de No dejen leer a A tranquila, viene otra persona a toparme..... espera me tocó la mejilla, el muy hijo de la fruta, y como toda pacifista que soy, le cojo la mano que tiene en mi cara, con  mi mano libre mientras pongo el libro en la butaca, y le hago una llave pero lo que no sabía era que el es EL profesor, por lo cual lo suelto y me siento a leer como si nada hubiera pasado.

Ahora el pobre me mira con miedo, eso es para que no se me vuelva a acercar a menos que sea obligatoriamente.

- Necesita algo profesor ? - le pregunto yo, pero vienen como 5 chicas y me comienzan a decir que yo soy una bestia y blah, blah, blah..., lo toman y se lo llevan, mejor para MI. Dejo el libro pues ya no lo voy a leer ahora y lo guardo y saludo a mis amigas y amigos que no los había saludado y me siento con ellos.

- Hola E - saludo a Edward - Hola I - saludo a Imara - Hola Christian -saludo al ya nombrado y me siento entre I y E, yo se que se gustan pero no lo quieren admitir, y por si acaso ellos tienen 14 años, yo soy la única con 13, y susurro - Yo se que estaban hablando de su noviazgo a escondidas, pero necesito quitarte la comida E, si me disculpas.. - y se la cojo y me siento al lado de Christian.

- Por qué no me llamas C, como I y E ? - me pregunta Christian.

- Porque me gusta tu nombre - le respondo sencillamente.

Déjalo así !Donde viven las historias. Descúbrelo ahora